A fin de junio vencía el plazo de 60 días para no entrar en “default” con el Club de París por una deuda de U$S 2.434 millones por capital e intereses, que al igual que el préstamo del FMI por U$S 44.000 millones nuestro país no puede pagar y está renegociando. Recordemos que el Club de París es un organismo formado por varios países capitalistas desde hace varios años para ayudar a gobiernos ante supuestas necesidades financieras en proyectos o emergencias.
La Deuda con este organismo usurero era en origen de U$S 5.000 millones en “default” desde la crisis del 2001 hasta el 2014, año en que Axel Kicillof, ministro de Economía de Cristina Fernández de Kirchner negoció pagar un total de U$S 9.690 millones en cinco cuotas reconociendo intereses adeudados y punitorios, venciendo la última en mayo 2019 que el Gobierno de Macri no cumplió.
El origen de la Deuda
Se remonta a la Dictadura del ’76, por la compra de material militar como dos helicópteros encargados a Inglaterra que nunca vinieron por la Guerra de Malvinas y la estatización de deudas producto de especulación financiera de empresas privadas promovida por el entonces ministro de Economía, Domingo Felipe Cavallo. Parte de la estafa de la Deuda Externa por U$S 48.000.- que dejó la corrupción de la Dictadura con las patronales. Dicha estafa fue investigada por la causa Olmos y declarada fraudulenta e ilegítima por el juez Ballesteros, pero eso fue desconocido por todos los gobiernos posteriores radicales, aliancistas, peronistas y macristas que la refinanciaban.
Actualmente la Deuda Pública del Estado central a Mayo 2021 llega a los U$S 338.564 millones. En este segundo semestre vencen unos U$S 32.621 millones. Desde que asumió Fernández aumentó U$S 27.874 millones y se pagaron unos U$S 7.000 millones en plena pandemia incluidos los intereses trimestrales por la Deuda al FMI .
Se pagó para quedar bien ante el FMI
Dentro de los ruegos de renegociación con la deuda con el FMI está en paralelo lo adeudado con el Club de París. Y a fin de mostrar buena letra con los organismos usurarios, el Ministro de Economía, Martín Guzmán, decidió con aval de los Fernández, adelantarles ahora U$S 430 millones de dólares, prometiendo negociar el resto a principios del 2022 pagando mientras tanto una tasa descomunal a nivel internacional del 9%.
A pesar de ello, la compañía MSCI yanqui, que elabora índices bursátiles para ayudar a los fondos de inversión, reclasificó y rebajó a la Argentina de la categoría de Mercado Emergente a Mercado Independiente. La ubicó así como economía de riesgo capitalista no aconsejable para invertir ante el peligro de entrar en Default en cualquier momento con una Deuda eterna e impagable.
El Gobierno en plena pandemia eligió entregar estos recursos a los usureros internacionales para rogarle un poco de asistencia ante la crisis. Los sistemas de salud, educación, vivienda y empleo estaban más que necesitados de estos fondos.
Ratificamos más que nunca que la necesidad del NO PAGO de las Deudas Públicas, internas y externas, es algo urgente. O se destinan estos fondos para ayudar a los trabajadores y al pueblo o se prefiere ayudar a las ganancias de los capitalistas financieros internacionales.