VAMOS A COMODORO PY EL 25 DE NOVIEMBRE, INICIO DEL JUICIO

El lunes 25 de noviembre está marcado el comienzo del juicio a Daniel Ruiz y César Arakaki. Un juicio previsto para castigar a los luchadores, que será utilizado para acusarlos a ellos.
La libertad de Daniel, luego de 13 meses de injusta prisión, es un triunfo de toda la campaña solidaria y un cachetazo a la Justicia patronal, el gobierno actual y el régimen y estado capitalista.
Es preciso seguir la campaña, para dar vuelta la tortilla: terminar con la persecución a Sebastián Romero (anulando la orden de captura que pesa sobre él) y utilizar el juicio de Daniel para pasar a la ofensiva.
Es decir, para acusar y juzgar (por parte de todos los organismos de DDHH, sindicales, sociales, políticos), de cara a la clase obrera y el pueblo, a todo el Estado capitalista y sus mejores gestores (Macri, Bullrich y compañía).
Para eso, hay que comenzar por derrotar una maniobra. Quieren postergar el juicio, previsto para el 25/11 para una fecha indeterminada el año próximo. El objetivo es justamente eludir la condena social, el escándalo que podemos provocar entre todos y todas, que debe resultar en un proceso judicial contra Bullrich y el gobierno de Macri, cuestionado por la ONU por manipular los tribunales.
Para eso, realizamos una conferencia de prensa este miércoles 13, exigiendo se respete la fecha de juicio.
Allí informamos junto a decenas de organismos que el 25 próximo realizaremos un gran acto, en coincidencia con el inicio del juicio, y expondremos los próximos pasos en el camino de acusar a quienes nos acusaron.
Junto a todos los que son solidarios con Daniel, nos queda otra batalla. El 18 de diciembre del 2017 miles de obreros enfrentamos la Reforma Previsional. El primer demonizado, tratado como un terrorista, fue un obrero mecánico, delegado de sus compañeros de la General Motors de Rosario, Sebastián Romero. Una tremenda campaña fue montada contra él. El Estado y la Justicia capitalista ofrecieron una recompensa de un millón de pesos (el doble que a los peores genocidas de la dictadura), por datos sobre su paradero.
Estaba en movimiento un operativo que, si Sebastián era detenido, podía terminar en un ataque muy grave, incluso físico, contra él. Fue forzado a la fuga.
Nuestro partido, el de Daniel y Sebastián, apoyó esa decisión. Resistimos las presiones de la prensa, de la justicia. Incluso de quienes aconsejaron que lo correcto era entregarse, porque la “izquierda seria” se pone a derecho, nunca elude los requerimientos de los tribunales.
Sebastián no se entregó. Y nosotros estamos de acuerdo con lo que él resolvió. Él es un ejemplo de la lucha contra el gobierno macrista, y a la vez un factor educativo para todos los activistas obreros y juveniles: ningún respeto a la Justicia patronal, ni a las instituciones del Estado capitalista.
Por todo esto, para derrotar la maniobra de postergar el juicio, para seguir luchando por el fin de la persecución a Sebastián, y para encarar un juicio acusando a los acusadores, tenemos una cita de honor este próximo 25 frente a los Tribunales de Comodoro Py.
Los esperamos.