CUANDO LOS OBREROS Y LOS ESTUDIANTES NOQUEARON A LA DICTADURA DE ONGANÍA

En junio de 1966 las Fuerzas Armadas, derrocan al radical Illia en instauran una dictadura con el general Onganía a la cabeza. Según él, venía a “establecer la paz por 10 años”.

Desde el inicio atacó al movimiento estudiantil interviniendo las universidades («La noche de los bastones largos»), los sindicatos, aplastó huelgas como la de los ferroviarios y los ingenios azucareros y desnacionalizó gran parte de la economía.  

Un mundo en llamas

 El ejemplo del “Mayo Francés”, una enorme revuelta de los obreros y estudiantes en 1968, impactó en nuestro país. En Estados Unidos, el movimiento negro peleaba por sus derechos y las movilizaciones contra la guerra de Vietnam y la intervención yanqui tenían una masividad nunca vistas en ese país, al igual que una gran oleada de luchas por los derechos de las mujeres. La «Primavera de Praga» era apagada a sangre y fuego por los tanques de la burocracia stalinista. En México, la “democracia” asesinaba a los estudiantes que ocupaban la UNAM. 

Mayo del 69, los días que cambiaron nuestra historia

El «Cordobazo» es sin dudas la expresión más alta de un proceso de luchas que comenzaron en Corrientes el 15 de mayo contra el aumento del comedor estudiantil. Los estudiantes se movilizan y se enfrentan con la policía. Cae asesinado el estudiante Juan José Cabral. La CGT local convoca a un paro y más de 10 mil personas acompañan el cortejo fúnebre.                           

El «Rosariazo»

La indignación corrió por todo el país. Dos días después en Rosario una marcha de repudio al asesinato se enfrenta con la policía. Un grupo de estudiantes tuvo una encerrona y allí es asesinado el estudiante Adolfo Ramón Bello. En repudio se convoca a una “Marcha del Silencio” para el 21, a la que adhieren las dos CGT en que estaba dividida la Central. En distintos lugares de la Ciudad hay enfrentamientos y cae asesinado el obrero y estudiante de la UTN Luis Blanco, de 15 años. Las luchas callejeras duran toda la noche; la represión es desbordada y tuvo que replegarse a los cuarteles. El día 23 se cumplió un paro general en Rosario.

El «Cordobazo»

En Córdoba la situación venía caldeándose. El 12 de mayo el gobierno había decretado la uniformidad del descanso laboral eliminando el “sábado inglés” (4 horas en vez de 8). Una asamblea de miles de obreros del SMATA (industria automotriz) termina con enfrentamientos con la policía que ponen en fuga a los represores. Los sucesos de Corrientes y Rosario no son ajenos: los estudiantes se movilizan por esos días ocupando el barrio Clínicas.

A nivel nacional las dos CGT (de los Argentinos y Azopardo) convocan a un paro para el día 30 de mayo. En Córdoba empieza el 29 con reivindicaciones zonales. Las columnas obreras confluyen con las estudiantiles con combates en diferentes tramos. Cae asesinado el obrero metalúrgico Máximo Mena. La dirección sindical es desbordada. El propio Agustín Tosco, de Luz y Fuerza dice “se nos fue de las manos”. Se asaltan armerías, se destruyen algunos comercios como Xerox y Bourrohug´s, el Jockey Club. La policía es totalmente rebasada. Por la tarde los barrios son controlados por los manifestantes y francotiradores. Los enfrentamientos duran hasta entrado el día 30. Solo con la participación del ejército se logra controlar la situación. Se habla de un centenar de muertos. El régimen militar quedó herido de muerte. Se abría una nueva etapa, revolucionaria, en el país.

El control de la burocracia sindical y el peronismo impidieron que se extendiera a Buenos Aires y a todo el país. Como balance del proceso, el periódico del PRT (LV), La Verdad concluía: “Si el partido (revolucionario) hubiera existido, hubiéramos logrado armas para los obreros y estudiantes, así como hubiera sabido elaborar un plan insurreccional…Los verdaderos revolucionarios deben prepararse para esa perspectiva, para superar las molotovs y las barricadas, conquistas ya definitivas del movimiento obrero y estudiantil, capacitarse para enfrentar a la policía, lograr armamento popular, enfrentar al ejército para dar vuelta a los soldados y la sub-oficialidad a favor de la insurrección”