La madrugada del 30/12 fue una noche de gran alegría para muchas y muches que llevamos años y hasta décadas peleando por el Aborto Legal. Sin dudas fue un gran triunfo. La emoción de ese día tiene que alimentarnos de fuerza para seguir con esta lucha.
Desde antes, durante y después de que se votó la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), venimos aguantando toda la resistencia conservadora de la Iglesia y los sectores que con justa razón se ganaron el nombre de “anti derechos”. Primero con amenazas y ahora con denuncias legales, buscan por todos los medios limitar la implementación de la Ley.
Antiderechos al acecho
Ejemplo de ellos son las distintas medidas cautelares exigidas por ONGs y referentes de las iglesias para frenar la IVE. Así, en el Chaco la jueza Marta Aucar de Trotti falló a favor de estos sectores y suspendió la aplicación de la Ley hasta que se analice si se contrapone a la Constitución Provincial. En concreto quiere decir que todas las mujeres y personas que necesiten un aborto en el Chaco no podrán realizarlo. Otro ejemplo claro es Tucumán. Esta provincia, gobernada por el peronista Juan Manzur, viene sumamente atrasada en materia de salud reproductiva. No respetan las leyes de educación sexual, muchos hospitales y clínicas no ofrecen tratamientos anticonceptivos a largo plazo como el DIU, no tienen protocolos para interrupciones legales de embarazo (ILE) y tienen farmacias enteras que no entregan misoprostol a los servicios de salud.
Por otra parte, a lo largo del territorio no paran de anunciarse los médicos objetores de conciencia. Si bien predominan en el sector privado de salud, como en algunas clínicas cordobesas donde el 100% de los médicos se declararon objetores, también hay casos similares en hospitales públicos. En el Hospital Zonal Alberto Antranik Eurnekian de Ezeiza el 50% de los médicos se negarían a garantizar una IVE.
¡Formularios y líneas telefónicas no alcanzan!
Frente esta realidad, el gobierno nos ofrece formularios y líneas telefónicas para hacer reclamos si nos encontramos frente a estos casos. Sin embargo, todes, incluido Alberto Fernández y el Ministerio de la Mujer, sabemos que esto no es suficiente.
No garantizar un acceso rápido y real a la interrupción del embarazo en el sistema de salud es, de hecho, volver a dejarnos solas para intentar buscar una solución. Y en esto las mujeres ricas siempre tienen más suerte que las mujeres pobres y trabajadoras para las que pagar una intervención no es opción.
Entonces, aunque reconocemos que la Ley y estos canales de comunicación son pasos muy valiosos en el camino de conseguir el aborto legal, aún necesitamos seguir peleando para que la IVE sea una realidad para todas las mujeres y personas que decidan abortar.
¿Qué nos hace falta?
Necesitamos que las direcciones del movimiento de mujeres no den esta pelea por terminada y llamen a continuar la lucha. Necesitamos cursos, capacitaciones en los centros de salud, continuar con los debates y enfrentar todos los ataques judiciales de los sectores anti-derechos. Hay que seguir movilizades para exigir que se destine presupuesto para que estas medidas sean una realidad.
Y para esto no alcanza con que sólo nosotras salgamos a luchar. Tenemos que organizarnos de conjunto, con los sindicatos y centros de estudiantes a la cabeza o hacerlo entre nosotres hasta obligarlos a actuar, si ellos no nos quieren escuchar.
Los problemas de las mujeres tienen que dejar de parecer que son sólo de nosotras. Que se implemente la IVE es un avance principalmente para mujeres y personas gestantes que no quieren tener hijes o consideran que no es el momento adecuado. Cada conquista que conseguimos las mujeres es un conquista para todo el pueblo trabajador.
¡Separación de la Iglesia del Estado!
¡Presupuesto para ESI, ILE, IVE y para erradicar la violencia hacia las mujeres!