Avanzada Socialista entrevistó a Javier Balcazar, delegado minero de Cerro Vanguardia, que conflicto mediante, acaba de ser evacuada debido a un brote de COVID-19
AS: ¿Cómo se dio el brote en el yacimiento?
Javier: La situación fue de total desborde. De 640 trabajadores que hay en el yacimiento, llegaron a estar aislados 280, entre positivos y contactos estrechos. Esto no solamente era un problema por el peligro de contagio. También afectó el normal funcionamiento de la mina. Las gerencias resolvieron que se debía trabajar normalmente.
Los sectores de limpieza y gastronomía, que se encuentran tercerizados, tenían al 50% de su personal aislado. Tuvieron que cubrir turnos de 15 horas para garantizar servicios fundamentales como la comida, la higiene y la seguridad, además de la atención de los aislados.
Operaciones, planta y mantenimiento tuvieron que adecuarse realizando multiplicidad de tareas, poniendo en riesgo la seguridad de los trabajadores. Para colmo la brigada de rescate que actúa en caso de accidentes se encontraba aislada casi en su totalidad, y desde el sindicato aseguraron que, aún aislados, deberían actuar en caso de emergencia, violando el DNU del Gobierno.
AS: ¿Cómo respondieron los trabajadores frente a esta situación?
Javier: Había mucha preocupación. Hicimos una asamblea sectorial que decidió para el turno de día de mina a cielo abierto y subterránea. Después se convocó a una asamblea general, donde participaron cerca de 200 compañeros. Ahí se decidió reclamar con un petitorio la evacuación del yacimiento con PCR previo. Dos días después, una tercera asamblea define que seríamos los trabajadores quienes, con los resultados del PCR masivo, definiríamos qué acciones tomar, sin descartar una medida de fuerza.
AS: ¿Y cómo se ubicó la dirección del sindicato frente a este reclamo?
Javier: Mariano Caliva, también delegado de la mina, boicoteó el llamado a la asamblea general. Mandó audios infundiendo miedo en los compañeros y así logró que, el día del paro, el turno noche trabajara, quebrando de ese modo la unidad.
Javier Castro de AOMA minimizó la situación en los medios y atacó a quienes reclamaban. Aunque también colocó la posibilidad de paralizar la actividad si los contagios seguían creciendo.
AS: ¿Cómo se resolvió la situación y qué conclusión sacás de este conflicto?
Javier: Con los resultados del PCR y la presión de tener a los trabajadores en alerta, la empresa ordenó la evacuación del yacimiento. Minera Santa Cruz, que estaba en una situación parecida, también fue evacuada.
Lo importante de este conflicto es ver cómo los trabajadores organizados podemos defender nuestras condiciones de trabajo y nuestra salud, aun cuando tenemos a la empresa o al sindicato en contra. Este es un ejemplo que sirve de antecedente y hay que replicarlo en todos los lugares en donde las empresas, con el aval del Gobierno y los dirigentes sindicales pretenden hacer lo que quieren con nosotros.