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Un peligroso enemigo de la clase obrera

Javier Milei apareció en el 2021 como un fenómeno electoral en CABA.

Desde ahí, se dedicó a nacionalizar su candidatura, con apoyo de los medios periodísticos, que lo usan para popularizar temas que pretenden imponer los grandes empresarios.

Apoyándose en la justa bronca de la población con todos los políticos tradicionales (“la casta” los llama), logró popularidad, y apoyo en sectores despolitizados de la juventud.

Su plan económico y social

Hasta ahora, iba dando pinceladas de su plan. Como la dolarización total de la economía, peor aún que la “tablita” de Martínez de Hoz en la dictadura, o la Convertibilidad de Menem-Cavallo, que dejó medio país desocupado (ver página 5).

Ahora acaba de presentar su programa. Es importante conocerlo.

Sus ideales “libertarios” pretenden la más absoluta libertad para que los capitalistas aumenten sus ganancias, a costa de un salto en la explotación del pueblo trabajador y la liquidación completa de la Soberanía Nacional.

  • La “dolarización” sería una devaluación y disminución salarial enormes, y precios altísimos de los productos necesarios. Es el método de parar la inflación, reduciendo el consumo popular al mínimo.
  • Pretende abrir completamente el comercio exterior, provocando una desindustrialización completa.
  • Eliminar retenciones a las exportaciones e impuestos de importación y cargas patronales (todo para los patrones), mientras mantiene impuestos a los trabajadores, como IVA y ganancias por salario. 
  • Privatizar lo que queda en manos del Estado, para el negocio de unos pocos, completando la obra de su admirado Carlos Menem (para él: “el mejor presidente de la historia”).
  • Eliminar las leyes laborales que quedan, obtenidas con años de lucha de la clase obrera: fin de las indemnizaciones, flexibilización laboral y precarización absolutas.
  • En Salud, defiende arancelar todos los servicios hospitalarios. Que se cure quien tenga plata, y quien no puede pagar tiene la completa “libertad”… de morir. Y restringir el acceso para los extranjeros.
  • En Educación, privatización y liquidación de la educación pública gratuita, a través del mecanismo de los “vouchers”, como se usó en Chile, donde muy pocos pueden estudiar una carrera universitaria. Escuelas buenas para los ricos y la clase media alta, y nada para los hijos de familias pobres.

Un retroceso en los derechos sexuales y de género

  • Prohibirá la enseñanza de la ESI (Educación Sexual Integral), y Victoria Villarruel, su candidata a Vice, es fanática de derogar el derecho al aborto legal. Una “liberal” que defiende los ideales más conservadores y totalitarios, y que impedirá la libertad de las mujeres y personas gestantes de decidir sobre su cuerpo, favoreciendo el negociado del aborto para las clínicas privadas clandestinas.

Recorte de derechos democráticos

  • Su plan va de la mano de la limitación (en la perspectiva de la prohibición) del derecho de huelga, movilización y lucha social.
  • Todo esto, naturalmente, chocará con la resistencia de los trabajadores y sus organizaciones, la juventud, el movimiento de mujeres, las organizaciones de Derechos Humanos. Milei lo sabe. Por eso, propone un reforzamiento del aparato represivo. El fortalecimiento de la policía, el endurecimiento de las leyes contra los pobres y la baja de edad para la imputabilidad (para encarcelar a los  jóvenes).

Y da signos muy claros de todo esto.

Su candidata a Vice, Victoria Villarruel, es hija de un represor de la Dictadura, a quien reivindica. Es fundadora de una organización que dice “defender los derechos de los militares de la Dictadura”; es decir, es defensora de los genocidas.

En sintonía con esto, se alió en Tucumán con Ricardo Bussi, hijo del famoso genocida. Y se rodea de economistas y personajes (como el propio Domingo Cavallo) que fueron funcionarios de la Dictadura Militar.

Y se vincula con los sectores más retrógrados de la iglesia evangélica. La pastora Andrea Almirón fue su candidata a gobernadora en T. del Fuego.

Un verdadero peligro

Milei parece loco, pero no es loco. Es un economista ultraliberal, que defiende un proyecto para salir de la crisis y la inflación que consiste en un ataque brutal a los trabajadores, el pueblo y la Soberanía Nacional. Un plan que solo puede ser impuesto mediante la liquidación de los derechos sindicales y de movilización, y la aplicación de una represión sistemática.

Cuenta con el apoyo de políticos, economistas y empresarios  como el citado Domingo Cavallo, o Cristiano Ratazzi, ex CEO de la automotriz FIAT. Son sectores minoritarios, pero muy conscientes de que este plan sería muy bueno para ellos si pudieran aplicarlo. Y que es el único proyecto que puede garantizar una recuperación duradera y fuerte de las ganancias capitalistas.

Milei no oculta su programa. Al contrario, lo defiende orgulloso. No es un oportunista electoral, sino un propagandista de un plan durísimo contra la clase obrera.

La clase trabajadora, la juventud, el movimiento de mujeres, deben enfrentar este proyecto en las elecciones y en las calles, en defensa propia.