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Corrupción al servicio del saqueo

La imagen de José López, ex secretario de Obras Públicas y hombre de confianza del matrimonio Kirchner, revoleando las valijas repletas de dinero en un convento, ha escandalizado al mundo entero y está sacudiendo el tablero político de nuestro país.
A quienes nos cuesta llegar a fin de mes y ponemos el hombro todos los días para parar la olla de nuestras casas, sólo puede provocarnos una profunda bronca e indignación. Y más aún, cuando vemos que los impresentables de siempre se suman para sacar su tajada.
Sin duda esto le ha dado un duro golpe al peronismo en general, y a todos aquellos que han defendido al anterior gobierno, en especial a los que se siguen reivindicando como kirchneristas. Como sucedió en ocasiones anteriores, incluso con situaciones más trágicas como los 51 muertos de la estación de Once también por causa de la corrupción, se ha producido una importante cantidad de pronunciamientos de artistas, personalidades y ex funcionarios que se han “despegado” del asunto e incluso reclamando explicaciones.
A su vez, Cristina permanece desaparecida, lo que resulta toda una sentencia. No resultan creíbles aquellos que intentan posar a la ex presidenta como una víctima de funcionarios inescrupulosos. Nadie sinceramente puede creer que Cristina no estaba al tanto de lo que sucedía. Se trata de uno de los funcionarios del riñón, de su más estrecho círculo de confianza, que acompañó al matrimonio K desde que estaban en la provincia de Santa Cruz. Tampoco es defendible aquellos que lo minimizan diciendo que se intenta ensuciar con estos hechos todo lo conseguido por el modelo anterior. En primer lugar, el “roban pero hacen” es inaceptable. Y además, no es cierto que el modelo anterior era favorable a los trabajadores, por algo son millones los que han dejado de apoyarlo (Ver página 3).

Por su parte, el macrismo, con ayuda de los medios de comunicación, en forma descarada intenta aprovechar la ocasión para distraernos y que se deje de hablar del ajuste en curso.
Parece haberse olvidado que él y su gobierno están igual de sucios, que son igualmente corruptos y que la gran mayoría de sus funcionarios están salpicados en todo tipo de negociados. El propio presidente Macri luego de negar infinidad de veces, tuvo que “blanquear” que tiene empresas off-shore en las Bahamas, a Niembro lo bajaron de la candidatura por haber estafado a la ciudad de Buenos Aires cuando el Pro gobernaba, el ministro Aranguren ha tenido que reconocer que tiene millones de pesos en acciones en la empresa Shell (de la que fue su CEO) y que ha beneficiado a dicha empresa en sus funciones como ministro de energía, y un largo etcétera.
En una clara operación mediática, lo que se intenta es sembrar la idea de que el empeoramiento de las condiciones de vida que hoy sufrimos se debe a que en el país existe una serie de corruptos que hacen las cosas mal, que es necesario un capitalismo eficiente para salir adelante.

Pero esto no es así. Como dice el dicho popular, lo que está podrido y huele mal es el cajón, no sólo algunas de sus manzanas. La corrupción, por más repugnancia que nos cause, tan sólo es la consecuencia lógica de un sistema basado en el saqueo y la explotación brutal de pueblos enteros al servicio de un puñado de empresas y bancos que no paran de enriquecerse. Como se dice en las fábricas, estas valijas son tan sólo un pago por los servicios prestados, “un vuelto” en comparación a los millones y millones de dólares que estas empresas amasan a costa de nuestro esfuerzo, a través de la fraudulenta deuda externa y el saqueo de todos nuestros recursos. Ese es el gran robo, que tanto Macri como Cristina, con distintos discursos, han garantizado todo este tiempo.

El plan de ajuste avanza

Justamente al servicio de este plan de sometimiento es que el ataque a los trabajadores y el pueblo avanza.
Y no sólo acá. Este gobierno es uno más de los que en el mundo intenta descargar la crisis económica sobre nuestras espaldas. No fue casualidad que todas las medidas económicas hayan sido bendecidas por el presidente de EE.UU, “mister Obama”.
La represión a los manifestantes contra el tarifazo en Rosario, en un acto cercado por gendarmes en el Día de la bandera, dan cuenta de ello. A su vez, finalmente el INDEC dio a conocer las cifras oficiales de la inflación de Mayo: 4,2%. El proyectado para el año va a rondar en un 44%. Los despidos y las suspensiones aumentan, y el hambre empieza a penetrar como un problema presente. A seis meses de gobierno, las promesas de que todo iba a mejorar en el segundo semestre no aparecen en el horizonte. Los que sí ganaron y festejan, son los banqueros, las multinacionales y los grandes empresarios (ver páginas centrales).
Sin embargo, desde el sector obrero, estatal y estudiantil se ve una gran disposición a luchar. Y no solo aquí. En Francia, además de la Eurocopa, el verdadero partido se está jugando en las calles, donde miles y miles de obreros y estudiantes enfrentan en la calle a la reforma laboral del “socialista” Hollande. En México, los maestros de Oaxaca dan el ejemplo enfrentando la reforma educativa y la represión del gobierno de Peña Nieto que ya dejó ocho muertos en esta lucha. Ellos enfrentan la misma entrega de la educación que hoy combaten nuestros docentes por estos pagos (ver página 13).
Si no se ha desarrollado una gran lucha similar en este suelo es por el rol de las conducciones de las centrales sindicales y de los principales gremios, que acordaron con el Gobierno la paz social en nombre de la gobernabilidad, ahora respaldados por el fallo antiobrero de la Corte Suprema de justicia que limita el derecho a huelga y se entromete en la organización de los propios trabajadores (ver página 3).

Hay otra salida: luchar por la Segunda y Definitiva Independencia

Como ya hemos señalado, hoy es necesario luchar para encarcelar a todos los corruptos y recuperar todo lo que se robaron: López, De Vido, la propia Cristina, Niembro, Báez, Macri, Aranguren, etc. Todos son e hicieron negociados con empresarios y deben ir tras las rejas.
Sin embargo, esto sólo la movilización popular puede lograrlo. No se puede confiar ni por un minuto en esta justicia que siempre defiende a los ricos, y que en muchos casos son cómplices y/o socios de los propios acusados.
A su vez, no hay que confundirse ni caer en la trampa. Esta pelea debe formar parte de un combate de fondo. No alcanza con limpiar a los corruptos porque estos son solo empleados muy bien pagos de los capitalistas. Hay que acabar con el gran robo que todos los días nos saquea, nos explota y nos mata.
Por ello, hoy no hay tarea más urgente que rodear de solidaridad a todos los que están peleando, unificando desde abajo la lucha para derrotar este plan de ajuste y represión que encabezan Macri y los gobernadores.
A doscientos años de nuestra Independencia, no queda otra. Los trabajadores debemos ser quienes sigamos el ejemplo de aquellos patriotas. No hay salida para nosotros sin romper las cadenas que nos oprimen. No hay salida sin dejar de pagar la deuda externa, sin expropiar a todas las multinacionales y poner todas las palancas de la economía bajo control obrero. Y como pasó en aquella oportunidad, no habrá independencia si esa pelea no se lleva a cabo a escala internacional.

Por ello, desde el PSTU te invitamos a que te sumes este 9 de julio a todas las actividades que estamos preparando para organizar la lucha por la Segunda y Definitiva Independencia que hace falta. Manos a la obra.