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A TONO CON EL AJUSTE

Para ganar votos el macrismo prometió en campaña eliminar el Impuesto a las Ganancias, algo que no hace ni piensa hacer, al igual que los gobiernos kirchneristas, que lo defendían aduciendo con su populismo que los trabajadores que más ganaban debían ser solidarios.

Este tributo es de la década del ’70 (ver recuadro aparte), y se ha transformado en un verdadero impuesto al salario que afecta actualmente a unos 2 millones de trabajadores y jubilados, desactualizado, con distorsiones e inequidades profundizadas desde 1999 con el gobierno de Fernando de la Rúa.
El proyecto macrista implica: aumento del mínimo no imponible sólo del 15%, se elimina la deducción por cónyuge y otros familiares y por los hijos queda hasta los 18 años en lugar de 24, y se modifican mínimamente las escalas congeladas desde 1999. (1)
De ser aprobado el proyecto, y con aumentos salariales aunque menores a la inflación, más trabajadores en relación dependencia, autónomos y jubilados se verán afectados por el impuesto. Es decir, “te perdonan un poquito pero te sacan otro poquito”.
Consultoras económicas explicaron que “del análisis de casos concretos, y estimando un incremento de los salarios de alrededor el 20% para 2017, se desprende que los asalariados tendrán una reducción del impuesto a ingresar que llega hasta el 5%”.(2) Una burla más a los trabajadores.
Abogados previsionalistas sostienen que “…muchos jubilados que no se veían gravados por el impuesto a la fecha de adquisición de sus beneficios, lo estarán a partir del año 2017”. (3)

Recaudar para pagar deuda

Seguramente de las negociaciones pre-electorales saldrá algún beneficio de unos pocos pesos a trabajadores y jubilados, pero tanto el Gobierno como la oposición patronal no pueden darse el lujo de eliminar un impuesto transformado en regresivo, pero clave en la recaudación para sostener el enorme déficit fiscal capitalista motorizado por la enorme deuda pública, especialmente la externa.
En el 2014 con Cristina, este tributo subió un 45%, llegó a los $267.075 millones, un 22% de la recaudación total. (4) En lo que va del año 2016, la recaudación total alcanzó a 1 billón, 442 mil millones de pesos, y la cuarta parte es por el Impuesto a las Ganancias.
Como explicamos en el número anterior de Avanzada Socialista, entre este año y el 2017 se abonarían intereses por la deuda pública, más de la mitad externa, por U$S 28.400 millones, unos $454.000 millones. Cifra millonaria que va a los buitres especulativos y que prácticamente podría eliminar el Impuesto a las Ganancias a trabajadores y jubilados. Algo que jamás harían políticos burgueses como Macri, Massa, y del peronismo y kirchnerismo, para beneficio de los trabajadores y el pueblo..

(1)(2)(3) – 2016-11-27 – Ieco Clarín
(4) 2015-03-31 – I-Profesional


UN IMPUESTO REGRESIVO

Fue una adecuación del gobierno peronista en la década del ‘70 de la antigua ley de “Impuestos a los Réditos” que databa de la década del ´30, creándose 4 categorías: rentas del suelo, rentas de capital, rentas empresarias y rentas del trabajo personal. Esta última afectaba en un principio a altos ingresos individuales como ejecutivos y gerentes de empresa, pero que con la inflación y necesidad recaudatoria de los sucesivos gobiernos burgueses empezó a afectar empleos con salarios menores. En la actualidad, la creación de la cuarta categoría, mantiene todavía adecuaciones de la famosa “tablita de Machinea” del gobierno radical de Fernando de la Rúa, no obstante algunos maquillajes kirchneristas, y debido a la falta de voluntad del Gobierno para actualizar índices, afecta a millones de trabajadores bajo una premisa, “cuanto más salario ganás más pagás”.