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Carlos Fuentealba: diez años

El próximo 4 de abril se cumplen 10 años del asesinato público de Carlos Fuentealba. Es necesario contar una vez más quién era, por qué estaba peleando en la ruta, cuál era el contexto político. Porque esa es la única manera de explicar lo que nos pasa hoy.

Reflexionar como docentes y como pueblo trabajador. Explicar nuestro presente, este Marzo del 2017 glorioso para la clase obrera, en donde salimos a marcarle la cancha a un gobierno de ajuste y hambre ¿Quiénes somos los guardapolvos blancos que llenamos las plazas de todo el país? Contra qué peleamos y qué somos capaces de hacer cuando nos juntamos y decimos ¡Basta!

Carlos y la pelea del 2007

Un año antes de la muerte de Carlos, en el 2006 los trabajadores de la educación de Neuquén enfrentamos la aplicación de una recién estrenada Ley de Financiamiento Educativo. La conducción nacional Celeste de la CTERA, al igual que lo hizo con la Ley Federal de Educación de los años ´90, aplaudía su aparición. Y la conducción provincial de ATEN, Azul y Blanca de Marcelo Guagliardo, ocultando junto a la Celeste que la Ley de Educación Nacional y de Financiamiento eran pedidas por el Banco Mundial, se apresuraría a cerrar la huelga de ese año por un inexistente aumento salarial y resignando el pedido de mayor presupuesto educativo.
En el 2007 salimos nuevamente, y esta vez las asambleas votan en forma masiva un pliego de reivindicaciones que pone en jaque al Gobierno: salario igual a la canasta familiar, mayor presupuesto educativo, todas las sumas al básico, presupuesto educativo que cubra las necesidades de la población, construcción de escuelas y creación de cargos necesarios, pase a planta de todos los compañeros auxiliares de servicio.

El fusilamiento público

El corte de ruta ese fin de semana santa, como parte de las medidas de fuerza votadas en asamblea, fue llevado adelante el día 4 de abril, pero antes de que se efectivizara el corte de ruta, los docentes fueron desalojados con balas de goma, gases lacrimógenos, bombas de pintura y un carro hidrante. Fuentealba se encontraba en el asiento trasero de un auto Fiat 147, que se retiraba del lugar, cuando el policía José Darío Poblete, integrante del Grupo Especial de Operaciones Policiales (G.E.O.P.) de la ciudad próxima de Zapala, disparó una granada de gas lacrimógeno hacia el auto, que se encontraba a unos 2 metros de distancia. El cartucho de gas lacrimógeno atravesó el vidrio del vehículo e impactó en la nuca de Fuentealba, causándole un hundimiento de cráneo. Producto de las lesiones provocadas por el disparo, Carlos fallece.

La lucha docente hoy

Hoy nos encontramos en una bisagra del conflicto docente. Con una paritaria nacional que no logra destrabarse y con toda la fuerza de millones de compañeros y compañeras movilizados en todo el país por salario y mejores condiciones laborales. Debemos ir a fondo en contra de todas las políticas de hambre y vaciamiento de la escuela pública, dentro de las cuales las reformas educativas a medida del Banco Mundial y del FMI, son el nudo y el origen de la cuestión. Reforma educativa, es necesariamente reforma laboral y previsional. Ellos vienen por todo, nosotros lo defenderemos todo, unidos y fortalecidos por las enseñanzas de los compañeros que nos arrebataron y que se han convertido en banderas que flamean hoy más alto que nunca.

• A diez años del asesinato de Carlos Fuentealba ¡Presente!

• Que la CTERA llame a Paro Nacional para el 4 de abril

• ¡Justicia completa! Juicio y castigo a los responsables políticos e ideológicos. ¡Cárcel a Sobisch!