Las conducciones de la CGT y las CTA´s, a pesar de la masiva marcha realizada, vuelven a darle aire a Mauricio Macri. Con un único y breve discurso, se limitaron a anunciar que a fin de septiembre se discutirá la posibilidad del Paro Nacional, mientras tanto el Gobierno recrudece los ataques.
Tal cual se vio en los medios de comunicación, desde temprano cientos de miles de trabajadores fueron llenando la plaza y sus alrededores, se estima cerca de 250 mil obreros, camioneros, de la construcción, bancarios, estatales y precarizados de los movimientos sociales. Sin embargo, las conducciones de los gremios optaron por poner paños fríos y postergar el enfrentamiento al Gobierno.
Esta acción estuvo varias veces por ser levantada y finalmente la realización de la misma fue, además de por la bronca, al servicio de una disputa interna de posicionamientos respecto de quién dirige la CGT.
La reforma laboral y los despidos continuan y Santiago no aparece.
Los motivos por los que se realizó la marcha siguen vigentes pero la dirigencia dilata las cosas. ¡No puede ser que a diario nos enteramos que a un familiar lo despidieron, que suspenden compañeros, que nos cambian los convenios de trabajo! Ante esta situación no sólo debería llamarse al plan de lucha sino que además los gremios y corrientes que dicen que hay que hacerlo, Pablo Moyano, Palazzo de la Corriente Federal, Michelli de la CTA Autónoma y los gremios combativos deberían estar ya organizándolo.
Los trabajadores en estado de movilización
Si algo quedó demostrado es que este pueblo ha dado batalla desde el primer minuto que asumió Macri en todo el país. El 22/08 se realizaron además marchas en el interior, pero la actitud del Triunvirato de la CGT intenta fragilizar el movimiento dando más aire al Gobierno.
Es por ello que resulta imprescindible impulsar desde cada sector asambleas, coordinación de las luchas y dar cuerpo a un encuentro de gremios y delegados con mandato para impulsar el plan de lucha contra las medidas económicas que se vienen implementando y las que intentarán como la reforma laboral y la reforma previsional.
Para ser alternativa ante la base obrera: ¿Aislarse o pelear al conjunto?
En este momento, los sindicatos combativos y la izquierda tienen la oportunidad y responsabilidad de presentarse como alternativa ante el conjunto de los trabajadores.
Para eso la gran política no puede ser hacer una columna de “todos los combativos y de izquierda” que se aísle de la base de los gremios que marchaban con sus sindicatos, por más correctas que sean las consignas que levanta. Mucho menos vemos eso como salida si van los que representan los gremios combativos con las banderas y algunos activistas. Otra sería la historia si el SUTNA hubiese realizado asamblea general para parar el 22 y que los 7 mil obreros del neumático ingresaran a Plaza de Mayo temprano para exigir el paro nacional!