En el marco de la lucha contra el desafuero de Cacho Vidal, vemos cómo hechos similares suceden en otras fábricas, incluso del mismo sector, como la planta de Arcor situada en el interior de la provincia, que se dedica a la chocolatería.
En el 2016 a nivel nacional nos enterábamos que la planta adelantaba sus vacaciones, es decir suspendía a 400 operarios, por acumulación de stock y caída en las ventas, según argumentos de la patronal. Pero esta patronal de capitales principalmente argentinos, nunca pierde un centavo y hasta fabrica todo lo que tiene que ver con el embalaje de sus productos, se expandió a los agronegocios, y está asociada al grupo Danone (Francia y La Serenísima).
Sin embargo, la comisión interna que dirige la fábrica es opositora a la verde nacional, y en este último tiempo vienen dando un fuerte combate a los retiros “voluntarios” como también a la persecución política.
En la actualidad la interna enfrenta tres pedidos de desafueros, es que estos delegados también paran las líneas de producción y hacen bloqueos en los portones impidiendo que salga la mercadería, algo que para la planta genera importantes pérdidas de dinero, y por ello es que junto a la justicia cómplice y con el aval del gobernador y de Macri, quieren descabezar a la interna.
Contra la reforma laboral, plan de lucha
Ya comenzaron con la modificación de convenios, a la baja, y pasando por encima de los existentes, como en el conflicto de UTA Córdoba cuando la patronal y el sindicato nacional se negaron a respetar el plus regional correspondiente… El sindicato de la Alimentación en Córdoba dirigido por Morcillo, está dentro de la CGT Regional Córdoba, y dicha Central no ha hecho más que pegar afiches llamando a votar a Unión Por Córdoba “contra la reforma laboral”, y en la movilización del 22 de agosto dijeron que irán a la reunión nacional a pedir que se ponga fecha al paro, pero esta vez ni siquiera amenazaron con el paro provincial, sumado a que la campaña contra la reforma laboral implica únicamente capacitar a los delegados a través de cursos.
Los trabajadores de las 4 plantas que tiene Arcor en la provincia, más todas las del país, necesitan de un paro nacional en la alimentación y del paro general y plan de lucha. Si los dirigentes no lo quieren hacer tendrá que surgir desde las bases y discutido en asamblea.