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ATEN: Gran lucha desde abajo, mal acuerdo

Luego de más de 5 semanas de lucha, finalmente, se firmó un acuerdo con el Gobierno que la conducción del sindicato provincial y parte de la oposición festejan como un triunfo. En este artículo queremos dejar bien en claro los alcances del acuerdo firmado que no solo es poco en relación a la fuerza de la huelga sino que en sí mismo es un mal acuerdo.

El acta se aprueba por una diferencia de 222 votos, (1943 por aceptar y 1721 por rechazar con 25 abstenciones). Y eso con la particularidad de un récord de participación atípico en el cual la seccional de Villa la Angostura, que cuenta con 178 afiliados, no asistió al plenario y mando un fax expresando que “reunidos 112 asambleístas, 106 votan por la aceptación y 6 por el rechazo”.

¿De qué se trata el acuerdo?

Rápidamente, una vez aprobada el acta acuerdo y levantada la huelga, la Celeste provincial de Marcelo Guagliardo (TEP) ha salido a declarar que: “el aumento conseguido fue una “victoria” y que hoy el gremio “puede demostrar que perforó el techo de Macri”.

El acuerdo establece una suba al valor punto del 4% retroactiva a enero que se pagará este mes por planilla complementaria y otro 4% de aumento a partir de abril. A ello se sumarán actualizaciones trimestrales atadas al Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mida Estadística y Censos de la provincia. Además, los docentes recibirán una suma “en negro” de 6.000 pesos en cuotas: 3.000 pesos entre el 20 y 25 de abril y el resto en tres partes iguales hasta julio.

Necesitamos despejar, para comprender mejor, esa suma en negro y por única vez de $6.000 y en cuotas, que es la que “engrosa” el ingreso hasta julio y que luego, todo volverá casi a la normalidad actual.

Todo el acta está simulada sobre un 5% de incremento del IPC trimestral, es decir un supuesto, ya que el primer trimestre del 2017, el IPC cerró en 4.1%. Entonces el cálculo salarial ya de entrada seria menor y por eso el Gobierno oculta esa realidad dando también por única vez un incremento a ese índice del 50% de su valor. Lo cual demuestra lo ridículo del escenario, ya que aun aumentando ese 50% (solo por este trimestre) el IPC neuquino cierra en 6.1% mientras en Buenos Aires cierra en 6.6%, no solo es una mentira ese índice de inflación, sino que es una locura que vivir en Neuquén sea más barato que en Buenos Aires.

Entonces, el aumento logrado es el incremento al bá- sico del 8% más el IPC siempre y cuando arroje un 5%, que daría un 13% a julio y un 23% en diciembre, y de bolsillo, el salario inicial, solo el inicial, recibe en enero 2018 un incremento del 31%. Esto no se traduce a medida que aumenta la antigüedad sino que decrece ya que parte 5% del IPC es remunerativo y genera achatamiento de la escala salarial. El salario queda así por debajo de la canasta básica que alcanzará recién el docente de máxima antigüedad en enero 2018. Es una acuerdo en bajas cuotas anualizado.

De acuerdo a la inflación provincial proyectada, el salario inicial de un maestro pasaría de $11.240 pesos a $14.359 pesos en enero de 2018.Recibe en un año $3119, un aumento mensual de $260. Ese es el acuerdo si despejamos los $6.000 en negro por única vez.

Nada tiene que ver atar el salario al IPC con una clausula gatillo, nada más lejos.

La conducción provincial empezó a trazar un panorama y el temor a que todo se desarme y los compañeros y compañeras vuelvan y que ya arrancamos lo que nuestras fuerzas daban y etc. La Fucsia-IS a través de Angélica Lagunas sec. Gral de Capital, la agrupación Rosa, la Púrpura (POR) y la Verde (PCR), todos integrantes de la CD capital, no solo se hicieron eco de este discurso sino que lo impulsaron desde la mesa.

La pelea en defensa de la educación pública no tardará en llevarnos a la calle nuevamente, a nivel nacional. La lucha que cada docente dio, esta aun llena de fortaleza.