¿LA DEUDA FRAUDULENTA IMPORTA MÁS QUE NUESTRAS VIDAS?
Se difunde que la inseguridad es mucho más un flagelo de las grandes urbes que de las pequeñas ciudades y pueblos. Esto no rige para los femicidios. Como ejemplo reciente, Renzo Chidichimo asesinó en Saladillo (provincia de Buenos Aires), de siete tiros a Rocío González, en el lugar de trabajo de ambos. Ella lo denunciaba hacía meses por maltratos, acoso laboral y violencia psicológica. Con denuncias, restricción perimetral, intervenciones de la Comisaría de la Mujer y la Justicia, igual la mató.
En todo nuestro país, las consecuencias de la violencia contra las mujeres son concretas y visibles.
A poco de llegar el Frente de Todos (FdT) al Gobierno, se prometieron grandes cambios, entre ellos un Presupuesto Nacional con Perspectiva de Género.
De sus tres ejes: Plan Nacional de Acción contra las Violencias por motivos de Género, Plan Nacional de Igualdad en la Diversidad e Interrupción Voluntaria del Embarazo – IVE, solo se avanzó y parcialmente, en la aplicación de la Ley de Aborto Legal. El Presupuesto Nacional con Perspectiva de Género consistió esencialmente, en cambiar programas de ANSES (Asignación Universal por Hijo – AUH, por ejemplo) o de Desarrollo Social (Tarjeta Alimentar, Potenciar Trabajo y otros) al renglón “mujeres y diversidad”.
Mientras tanto, en la población pobre, desocupada, o con trabajos precarios es mayoría la femenina y/o perteneciente a otros sectores oprimidos de la clase trabajadora. Una infinidad sin trabajo, vivienda salud, educación, sin perspectiva de autonomía económica y condenada a una vida de violencias.
Pero para todo esto nunca hay dinero, ya que se va a las manos del FMI y demás buitres usureros, derivando millonarios recursos a Deudas e intereses impagables que el pueblo trabajador no contrajo, y a operativos corruptos con multinacionales y grandes patronales argentinas.
1 femicidio cada 29 horas.
9 niñas, niños o adolescentes violadas/os o agredidas/os sexualmente por día.
203 niñas y mujeres por mes ingresan al registro de desapariciones.
27,7 % es la brecha de género en ingresos: 24,5% en el trabajo formal y 34, 9% en la informalidad.
3,9% es la brecha de género en la tasa de desocupación y subocupación y 1,7% en el acceso a empleo formal.
PLAN OBRERO Y EMERGENCIA NACIONAL YA
A 8 años de aquella multitudinaria movilización que visibilizó la terrible situación que padecemos, no hemos avanzado demasiado. Tanto el macrismo como el Gobierno de Alberto Fernández y Cristina son responsables.
Es urgente aplicar un plan obrero de emergencia que arranque por la ruptura con el FMI, dejar de pagar la estafa de la Deuda Externa e Interna y renacionalizar y estatizar bajo control de sus trabajadores las empresas de servicios y los recursos naturales, aumentar fuertemente la carga impositiva a las grandes empresas, sobre todo las multinacionales, más otras medidas. Con esos recursos es posible impulsar una verdadera Emergencia Nacional que combata la violencia machista. (Ver cuadro)
Pero estas medidas son el camino hacia un cambio total, donde el poder lo tenga la clase trabajadora. Solo una lucha encabezada por la clase obrera unida, acaudillando a otros sectores populares, será capaz de derrotar al imperialismo, echarlo de nuestro continente con una revolución como en la Primera Independencia y conquistar una Segunda y Definitiva, con sus mujeres y oprimidos como parte de las primeras líneas.
Así, podremos instalar un gobierno obrero y popular, comenzar el derrumbe de esta sociedad tan injusta y edificar una nueva, sin explotación ni opresión: el socialismo.
EMERGENCIA ES IMPLEMENTAR MEDIDAS COMO:
Prisión y castigo ejemplar para los asesinos de mujeres y diversidades. Comisiones investigadoras y tribunales populares para garantizarlo. Tratamiento psicológico y control permanente dentro y fuera de la cárcel.
Creación de centros estatales de atención de mujeres y diversidades, con poder de recibir denuncias, garantizar apoyo jurídico, médico y psicológico gratuito a las víctimas de violencia y con atención las 24 horas.
Construcción de casas de refugio, con los profesionales e infraestructura necesaria para albergar a las mujeres y diversidades que sufren violencia y a sus hijos/as.
Subsidios, vivienda y prioridad en el empleo para las víctimas de violencia familiar y para las jefas de hogar con hijos/as a cargo, base de cualquier proyecto de vida independiente y para empezar a erradicar la prostitución.
Basta de trabajo precario, igualdad salarial, aplicación efectiva del cupo laboral trans, salarios y jubilaciones iguales a la canasta familiar indexados automáticamente con la inflación.
Presupuestos para combatir la violencia, trabajo, vivienda, educación y salud.
Extensión de las licencias por maternidad/paternidad, por enfermedad familiar, licencia por violencia de género y día femenino; guarderías, jardines maternales y jardines de infancia gratuitos y de calidad para hijos/as de trabajadores/as.
Separación de la Iglesia y el Estado. Ampliación de la ESI, educación sexual no sexista que se imparta también en fábricas y otros ámbitos laborales, anticoncepción gratuita y acceso al aborto legal sin las restricciones que imponen la ley y las carencias actuales.
Organización de la autodefensa contra la violencia machista y la represión a las luchas en sindicatos y centros de estudiantes.
Auto organización para imponer este programa básico a la CGT, ambas CTAs, a la dirigencia estudiantil y de los movimientos sociales
NO ES SOLO UN PROBLEMA DE ARGENTINA
La invasión de Rusia a Ucrania ha generado terribles casos de violencia sexual relacionados con la guerra. Casi la mitad de los 244 millones de migrantes y la mitad de los 19,6 millones de personas refugiadas del mundo son mujeres y niñas. Al menos 1 de cada 5 refugiadas o desplazadas es víctima de violencia sexual.
Explotación, discriminación por género, por diversidad sexual, racismo, xenofobia, violencia machista, guerras, miseria, marginalidad, prostitución. Todo esto tiene un nombre: capitalismo.
¿Existe un capitalismo humanitario?
A pesar de los dichos de Cristina Fernández sobre que “si vamos a hacer capitalismo, hagámoslo en serio y para todos y todas, sin exclusiones (…)”, esto no es posible.
El capitalismo imperialista solo beneficia y enriquece a las empresas y financieras. Para eso, descarga todos los ajustes y violencias contra el pueblo trabajador, y más duramente contra sus mujeres y diversidades. Se nutre de las divisiones que genera el machismo, la lgbtfobia, la xenofobia, el racismo, para erosionar la unidad de la clase trabajadora y debilitar su fuerza en la lucha contra todos los males de este sistema.
No hay capitalismo con “todos y todas” adentro. Para terminar con la explotación y opresión tenemos que destruirlo.
3J EN CONGRESO
CERCA DEL FDT, LEJOS DE LAS TRABAJADORAS
El sábado 3J hubo movilizaciones en todo el país, pero distantes de las multitudes de años anteriores.
Quienes son parte de este Gobierno o lo apoyan: Ni Una Menos (NUM), mujeres de CGT y CTA, AMMAR (de “trabajadoras” sexuales), hicieron su acto frente al Congreso de la Nación bajo la bandera “Vivas, libres y desendeudadas nos queremos”.
Prácticamente abandonaron las calles durante cuatro años, dejando librados/as a la saña patronal a las/es trabajadoras/es, en pos de no cuestionar a este Gobierno.
Hoy, están embarcadas en las elecciones y en postular a Cristina Fernández. Nos dicen que la culpa de todo la tiene una Justicia que, sabemos, es machista y anti trabajadores/as, pero nunca van al fondo de la cuestión. La famosa reforma judicial “feminista“ de la que hablan, es la contracara de la dudosa proscripción y persecución a Cristina Fernández.
Hacen lindas consignas, pero nunca explican cuál es el camino para desendeudarse ni por qué su líder, Cristina, se reivindicó pagadora serial mientras gobernaba. No plantean romper relaciones con el FMI o dejar de pagar la corrupta Deuda Interna y Externa, fuente de nuestro sometimiento y de la sangría económica que este Gobierno propone como plan económico.
3J PLAZA DE MAYO
JUNTO A FAMILIARES DE VÍCTIMAS DE VIOLENCIA MACHISTA
Muchas organizaciones políticas, territoriales, sociales, marchamos a Plaza de Mayo, acompañando a la Asamblea de Familiares Víctimas de femicidios y violencia machista. Fuimos a gritarle al Gobierno que la situación ya no se aguanta más, que es necesario frenar los femicidios, la violencia machista y la represión que sufrimos cuando salimos a luchar. Que tantas jóvenes siguen desaparecidas y no sabemos de Tehuel de la Torre, el joven trans. Que el Gobierno, la justicia machista, la policía, amparados por las Iglesias, son responsables. Que es necesario dejar de pagar la Deuda y romper el sometimiento al FMI.
Las organizaciones que componen el FIT-U, convocantes de este llamado, lamentablemente tienen su centro en la carrera electoral. Desde el PSTU saludamos la Asamblea que las familias están poniendo en pie y estuvimos presentes. Vemos necesario agruparnos en fábricas, escuelas o barrios, con nuestros compañeros, para organizar la autodefensa contra la violencia machista y la represión a las luchas. Con esa fuerza debemos empujar a que cada organización obrera, estudiantil o movimientos sociales, tome estos reclamos en sus manos, o pasarlas por encima para lograrlos.