Los trabajadores del mismo gremio, Pasteleros, se encuentran en lucha. Unos por mantener su fuente de trabajo, Bimbo, luego del incendio de una de las 4 plantas que la multinacional tiene en el país (la de San Fernando). Otros son de La Salteña, que pertenece al Grupo Molinos de Pérez Companc. En ambas empresas se sufren los ataques de las patronales contra sus trabajadores con la total complicidad de los dirigentes de su sindicato. Recordemos que Luis Hlebowicz, el Secretario General del Gremio, fue uno de los preferidos del ex ministro Jorge Triaca bajo el Gobierno de Macri y se lo llevó de paseo por Europa, gastando millones de pesos. Casualmente, los dirigentes de La Salteña y los de Bimbo son los referentes de la Lista Celeste y Blanca, opositora en el gremio de Pasteleros.
La Salteña: “La empresa nos quiere llevar por delante”
Los 300 trabajadores de La Salteña, hicieron un paro de 72 horas por una recomposición salarial del 10% debido a la pérdida del poder adquisitivo de los últimos cuatro años. La dirección del gremio firmo una paritaria del 49% a futuro pero que no contempla lo perdido. Por eso en asamblea los compañeros votaron por unanimidad, primero un paro de 24 horas pero que se prolongó por 48 horas más al no tener ninguna respuesta ni de la empresa ni del Gobierno a través del Ministerio de Trabajo, según informa Ezequiel Barbeito, delegado de los trabajadores.
La Salteña está situada en el Parque Industrial de Burzaco (Almirante Brown). La empresa viene de apriete en apriete. Ha eliminado el turno tarde, cambiado horarios, obligando a trabajar 12 horas en algunos sectores varias veces a la semana. Al comienzo de la pandemia la Comisión Interna debió hacer un paro para exigir un protocolo que asegurara la salud de los trabajadores. El Grupo Molinos, de una de las familias más ricas de la Argentina, es uno de los principales jugadores en la industria de los alimentos, obteniendo ganancias por más de 1700 millones de pesos durante la pandemia.
Por eso la bronca estalló y no solamente pararon, salieron a la calle y cortaron durante todo el turno mañana las dos principales avenidas, mostrando una gran combatividad. Ahora, para evitar el desgaste, levantaron la medida y esperan una propuesta patronal. Desde el PSTU, nos hicimos presentes, en el corte, apoyando las medidas y volanteando el Parque Industrial haciendo conocer el conflicto y llamando a la solidaridad. No hay que descuidarse, hay que estar preparados ante las maniobras patronales y convocar a las fábricas del Parque a manifestar su apoyo solidario.
Bimbo: de esenciales a descartables
Bimbo es de una multinacional mexicana. En mayo se produjo un incendio que destruyó una parte de la fábrica de San Fernando (zona Norte del Gran Bs.As.) dedicada a producir congelados.
Luego del incendio los compañeros esperaban ser reubicados en algunas de las otras plantas que la empresa tiene en el país, mientras esperaban la reconstrucción de la parte incendiada. Sin embargo después de cobrar la primera quincena la empresa les comunicó que cerraría la totalidad de la planta de congelados y los despediría a todos. Los trabajadores denuncian que durante toda la pandemia trabajaron a “full” y ahora los descartan. “Nosotros no queremos ningún tipo de indemnización queremos los puestos de trabajo” dice el compañero Walter Quaranta. “Vamos a seguir la pelea por todos los puestos de trabajo”, aseguran. Los compañeros han hecho actos en la puerta de la fábrica, donde convocaron a organizaciones sindicales, sociales y partidos. También movilizaron al Ministerio de Trabajo el día de la audiencia el 24 de junio. Se viene una pelea dura, ya que la patronal mexicana cuenta con la pasividad del Ministerio y la complicidad de los sindicatos y del Gobierno, que acaba de prorrogar el decreto antidespidos, pero los permite en los hechos. Los compañeros cuentan con la solidaridad de las organizaciones que se han hecho presentes, como el PSTU, entre otras. Habrá que fortalecer esa solidaridad tanto entre las empresas del gremio como los barrios, las fábricas y lugares de trabajo vecinas.