Los trabajadores ya estamos sintiendo las primeras consecuencias de la profundización del ajuste acordado:
1.LA INFLACIÓN: la Carta de Intención de Macri asume una inflación del 27% para el 2018, y el FMI suspendería las cuotas si llegara al 32% o más, que es muy posible. Los precios de los alimentos, medicamentos, vestimentas, construcción, tecnología, alquileres, y los servicios están sufriendo colosales tarifazos e incrementos producto de la devaluación del dólar, y así el Estado recauda más impuestos.
2.LAS RESERVAS DEL BCRA: al 4 de junio último eran de U$S 23.100 millones y no de U$S 49.000 millones como aduce el Gobierno. De los primeros U$S 15.000 millones, U$S 5.500 irían para reforzar reservas pero U$S 9.500 se podrán vender en la plaza financiera, no para inversión, producción y generar empleo. El destino será los bancos, los especuladores, el giro de ganancias al exterior, la fuga de divisas.
3.TASA DE INTERÉS: el compromiso es mantenerla en el 40% hasta que supuestamente baje la inflación. Una tasa que no beneficia precisamente a generar préstamos a trabajadores, como los hipotecarios, consumo y pequeñas industrias.
4.EL DÓLAR: el Gobierno permitió llegar a una cotización de casi $30.-, una colosal devaluación en el tiempo, y garantizará libre flotación, es decir, que regule el “sagrado” mercado. Una fiesta para los exportadores del campo, por ejemplo, que vienen reteniendo liquidación de exportaciones a la espera de más devaluación. Millonarias ganancias pero con mayores costos y más dólares en fuga al exterior.
5.LEBACS: Macri se compromete a rescatar en 2 a 3 años unos U$S 25.000 millones en estas letras. Es decir, con los fondos del FMI se pagarán a los que prestaron al Gobierno y ahora rescatarán sus dólares para girarlos fuera del país, cambio deuda por deuda.
6.JUBILACIONES: el plan es una reforma previsional que lleve la jubilación a su mínima expresión prolongando la edad para retirarse. De ahí el compromiso al FMI de liberar y vender el Fondo de Garantía de Sustentabilidad del ANSES, las reservas del sistema jubilatorio, para reducir el déficit fiscal. En otra palabra, peligran las futuras jubilaciones y pensiones.
7.REFORMA LABORAL: promesa de modificar convenios de trabajo, garantizando la libre contratación, baja de indemnizaciones, rebajas salariales. En el Estado congelamiento de sueldos y de ingreso de personal.
8.RECESION Y DESEMPLEO: se profundiza la caída de puestos de trabajo, y miles de suspensiones por menos producción y ventas y las cadenas de pago afectada. Entramos en una recesión como la que afecta a Grecia.
9.SUSPENSION DE OBRAS PUBLICAS: ya se paralizaron varias obras como Atucha III, hospitales, escuelas, rutas, autopistas, planes de algunas viviendas.
10.MAYOR ENDEUDAMIENTO: Pagar deuda con deuda es lo que viene haciendo nuestro sistema capitalista. El FMI presta $50.000 millones pero para financiar más deuda y con el pago de intereses al contado, el verdadero motor del déficit fiscal y la inflación. Si debemos U$S 350.000 millones en tres años deberemos U$S 400.000 millones.