Ocupaba tres puestos más: Presidente del Bloque de Concejales del massismo, Secretario General del Sindicato de Gastronómicos (UTGHRA) de la zona sur de la provincia de Buenos Aires y Presidente del Club Argentino de Quilmes. Perdió su banca y los demás cargos al estallar el escándalo, hace tres años. El entramado mafioso alrededor de Zisuela compromete a importantes personajes tanto del Frente de Todos, como de Juntos.
El pasado jueves 16 de setiembre Daniel Zisuela, preso desde 2018 por regentear una red de trata, recibió una pena de 13 años de prisión, muy inferior a los 20 años exigidos por la fiscalía.
Es la primera vez que un miembro del poder, considerado intocable, es penado por semejante delito. En 1997 ya era dueño de una whiskería donde prostituía jóvenes amparado en su puesto de concejal peronista del, por entonces, intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra, uno de los “barones del conurbano”. Un año después Zisuela fue condenado por explotación laboral de trabajadores rurales en la causa “La voz del campo”, donde además Pereyra y otros funcionarios, fueron denunciados por enriquecimiento ilícito, malversación de fondos públicos y varios delitos más. La causa penal jamás se resolvió.1
En el juicio actual, que lo llevó a prisión, quedó implicado también su hermano. Zisuela captaba chicas de 15 y 16 años, de bajos recursos económicos, con la excusa de invitarlas a actividades de su partido. Luego las alcoholizaba, drogaba y les daba plata a cambio de sexo con él. Después las obligaba a prostituirse con sus clientes en hoteles, bares y casas de la zona.2
En la puerta del juzgado donde se dictó la sentencia se realizó un acto desde la mañana del 16 de setiembre hasta pasado el mediodía. Allí se expresó el rechazo por lo insuficiente de la condena, se denunció la complicidad de los partidos políticos patronales, del poder judicial y de la policía en el negocio de la prostitución y se convocó a luchar por el desmantelamiento de las redes de trata.
Máxima condena a Zisuela y castigo a todos los involucrados.
El próximo paso jurídico será la apelación de la sentencia, insistiendo en la pena de veinte años.
El abogado de las víctimas, José Luis Calegari, adelantó además que se realizará un segundo juicio, vinculado con el de Zisuela, contra los posibles cómplices mencionados por los denunciantes.
«Se determinará la responsabilidad de Darío Olmedo (Secretario General de ATE Varela), Juan Olmedo (ex secretario general de UOCRA), Mirta Rojas referente de Libres del Sur y candidata a concejal en la lista de Randazzo, Amancia Báez ex concejal del Frente para la Victoria y actual gerente de Anses Varela, Hugo Pereyra secretario de Articulación Institucional del Municipio de Florencio Varela, Franco Risso Subsecretario de seguridad y defensa civil de la Municipalidad de Florencio Varela, Negro Barraza funcionario de la subsecretaría de seguridad y defensa civil de la Municipalidad de Florencio Varela, Pamela Sosa ex colaboradora de Daniel Zisuela y militante del Frente de Todos, y Cacho Escobar, colaborador y empresario», enumeró Calegari.
Además, figuran dos candidatos de la lista ganadora de la interna de Juntos: «Son Diego Giménez (ex tesorero de la UOCRA y candidato a quinto concejal) y Octavio Astudillo (ex colaborador de Zisuela y candidato a séptimo). Es el comienzo de un proceso dónde por primera vez un poderoso va preso pero no estaba solo«.3
Esta cadena de repugnantes complicidades muestra por qué pueden perpetuarse las redes de prostitución y trata, vinculadas también con el narcotráfico. Son males incurables dentro del capitalismo, donde el lucro lo justifica todo y confirman la necesidad de una revolución obrera y socialista y de un gobierno de trabajadores y trabajadoras.
Pero la tarea inmediata es ampliar la organización y seguir la pelea y la movilización. Porque debemos lograr la máxima condena para Zisuela. Y además, tenemos que luchar para que se conforme una Comisión Investigadora Independiente de los poderes político, judicial, policial, de la dirigencia gremial vendida, de la conducción del fútbol, de la Iglesia Católica y de las demás iglesias, que, como mínimo, avalaron tantos años de impunidad. Es la única forma de poner tras las rejas a todos los encubridores y cómplices.
1Página 12, 03/09/2021.
2Ídem anterior.
3Clarín, 16/09/2021