EL CAMPO AMENAZA, EL GOBIERNO SE ASUSTA

El primer mes del año terminó igual al mes anterior:  enero cerró con una inflación del 4%.

Frente a esta situación el gobierno de Alberto Fernández  salió con declaraciones hacia el campo: “Si el campo no entiende, voy a subir las retenciones y establecer cupos a la exportación”

Esto puso en alerta a la oligarquía del campo, que no dudó un segundo en amenazar con un paro inmediato.  Así lo señaló Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). «Si esto se concreta, la medida de fuerza será un hecho; sería inmediato un cese de comercialización«, y a la vez comenzaron una victimización de que no tienen influencia en el aumento de los precios: “Lo que nos molesta es el diagnóstico equivocado, no somos formadores de precios. Somos un eslabón que vendemos a precios a tomar y nos están juzgando equivocadamente. Hay que saber lo que se está diciendo. Que el Estado se fije bien como el paquete impositivo tiene injerencia en el producto que uno compra”.

Nada más lejos de la verdad. La suba de las commodities llevó a los exportadores de granos y carnes a desabastecer el mercado interno y a aumentar los precios para equilibrar con los precios internacionales, la muestra de eso es la información de la Cámara de la Industria Aceitera que el sector exportador cerealero tuvo ingresos superiores a los 2000 millones de dólares sólo en el mes de enero.

Estas medidas del campo siguen poniendo en jaque el bolsillo de las familias obreras que vienen sufriendo aumentos, inflación, reducción salarial y precarización.

Por su parte el Gobierno, después de la amenaza de la Mesa de Enlace, rápidamente llamo a “una mesa de diálogo” donde anunciaron que no va haber aumento en las retenciones y un compromiso de trabajo conjunto para evitar aumentos de precios.

Una vez más el Gobierno retrocedió frente a una amenaza de los terratenientes. Vale recordar que en enero había anunciado el cierre de la exportación del maíz hasta el 1º de marzo. Bastó un paro de 72 horas de la Mesa de Enlace para que el Gobierno fuera para atrás con la medida.

Queda más que claro que el Gobierno podría frenar todos estos aumentos brutales de precios, pero prefiere mantener contentas a las grandes fortunas del país antes de garantizar un plato de comida al pueblo pobre.