other

El doble discurso de Cristina

Ministro de economía, Axel Kicillof, junto a Janet Yellen, presidenta de la Reserva Federal estadounidense.

Entre el 9 y 12 de octubre el ministro de Economía, Axel Kicillof, y el nuevo presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, participaron de la Asamblea Anual del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. Lo llamativo de su presencia es el marco en que se realizó el viaje, visto el reproche de Cristina al imperialismo económico financiero, culpando al gobierno de Estados Unidos de complicidad con el Juez Griesa en el juicio con los “fondos buitre”, y una velada acusación sobre supuestos ataques físicos a su persona por parte del coloso capitalista yanqui. Una ficción populista para tapar las verdaderas intenciones del Gobierno K de seguir como pagador serial de la estafa de la deuda externa y conseguir aún más crédito para sostener la crisis económica argentina con un déficit fiscal enorme.

 

Para desviar la atención popular de la crisis económica, el Gobierno llevó a estas jornadas algunas acusaciones que no son novedad para el FMI, pero con el agregado de que existirían buitres buenos y buitres malos. Así Kicillof ratificó teatralmente recientes declaraciones del Gobierno K: 1. Adjudicar al organismo responsabilidad en las últimas crisis financieras internacionales, 2. Solicitar al FMI un pronunciamiento de rechazo al accionar de los fondos buitre y un respaldo a la posición argentina en el litigio judicial donde el juez Griesa falló a favor del buitre malo Paul Singer, del fondo NML, y 3. Un cuestionamiento a incluir en sus Proyecciones Económicas Mundiales, que nuestro país continuaría en recesión este año y el próximo 2015, aumentando la tasa de desempleo.1
Aunque Kicillof diga que el organismo le dio cierta razón, al FMI seguramente estas declaraciones le hicieron simples “cosquillas”. Se limitó a ratificar algunas sugerencias sobre la conveniencia de reveer ciertas cláusulas en futuras renegociaciones de deudas, como la de “pari passu”2, llevando su interpretación a que todos los acreedores tienen el mismo tratamiento legal, y la de negociación colectiva, dando a una mayoría calificada de acreedores  la capacidad de imponer un criterio de negociación al conjunto.3
Para el Director Legal y Consejero del organismo, Sean Hagan, estarían “muy preocupados por el caso argentino y lo seguimos de cerca”, nada más4. El Gobierno informó que tomó nota del informe del FMI vinculado a las deudas soberanas (el nuevo caballito de batalla K que dispone un cambio del domicilio de pago pero reconociendo la deuda) y la Cancillería a cargo de Héctor Timerman dijo que “es un paso importante que el FMI haya dado un paso adelante en el reconocimiento y búsqueda de una solución adecuada”.5

FMI malo o FMI bueno

Pero en la declaración del FMI no aparece una sola referencia a caracterizar a los “holdouts” como aves de rapiña, algo ansiado por Kicillof. Lo que más le preocupa al ministro de Cristina es la declaración del FMI donde augura un retroceso de la economía argentina del 1,7% para este año y del 1,5% para el 2015, además de sañalar que la desocupación crecerá al 8,8% en 2014 y al 9% en 2015. Los trabajadores bien sabemos que tanto las del Gobierno como las del FMI son cifras mentirosas que no reflejan la realidad: una desocupación de 2 dígitos como la que estamos padeciendo, con millones de empleos precarios y en negro.
En Avanzada Socialista Nº 65, de abril 2014, hicimos referencia al doble discurso del Gobierno K cuando denunciamos también la presencia de Kicillof en otra Asamblea del FMI y el Club de París. Y nuevamente el Gobierno ahora asistió con los cuestionamientos que mencionamos.
Pero entonces la pregunta a Cristina sería: “¿Para qué la presencia ante la cúpula del imperialismo económico-financiero mundial criticado por sus recetas capitalistas ‘ortodoxas’ que tanto daño hacen a los trabajadores y los pueblos?” ¿Podemos creer que el único argumento expuesto por Kicillof en abril era su simple participación “como lo hicieron en el pasado otros ministros de economía que me precedieron”, y ahora para “solicitar apoyo contra los fondos buitres y cuestionar proyecciones sobre nuestra economía”, cuando Néstor se había ya supuestamente despedido del FMI?

La otra pata del discurso

Según la agencia gubernamental de noticias Telam, la delegación nacional liderada por Kicillof y Vanoli, manifestó que “Argentina tiene la voluntad de normalizar, en un marco de dignidad, todas las relaciones financieras e idealmente resolver también con el 100% de sus acreedores”.6
Agregaron además que “…a partir de enero (2015), cuando caiga la cláusula RUFO, se va a analizar la situación y si un potencial acuerdo está en línea con el interés nacional”. Una primera conclusión: en la reunión del FMI y Banco Mundial el Gobierno abrió ya la puerta para negociar el pago de los buitres malos, contradiciendo los carteles camporistas de “patria o buitres”.
Kicillof destacó también “las distintas propuestas de financiamiento recibidas de parte de bancos de inversiones que serán evaluadas…” y “que no es cierto que Argentina no tiene acceso al financiamiento externo”.
En la visita a Washington, Kicillof se reuníó además con varios fincionarios de instituciones financieras y políticas. Con el titular del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, trataron programas de créditos de Argentina con el organismo interamericano y los futuros proyectos en estudio.
Al presidente de la Corporación Andina de Fomento (CAE), Luis Enrique García, le agradeció el financiamiento de proyectos de infraestructura y de desarrollo tecnológico para Argentina.
Se entrevistó con Janet Yellen, presidenta de la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos, que por más que digan que hablaron de las consecuencias del litigio con los buitres malos, la envergadura de dicha funcionaria hace pensar que se trataron temas de pagos de deuda y nuevos financiamientos para Argentina.
Fuentes del Banco Mundial confirmaron además vinculaciones con el Gobierno para evaluar la situación del plan de préstamos avalado para el país.

Más endeudamiento, más ajuste

El ministro Kicillof negó que haya existido un cortocircuito con el Director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Alejandro Werner, sobre el reporte que proyecta una continuidad en la baja de la economía argentina también en el 2015, dado que “la falla estaba en tomar datos del primer trimestre de este año”. Es decir, el FMI es malo, pero no tanto, no nos peleamos del todo. Sabe que necesita de su apoyo para aplicar ajustes ortodoxos, aunque lo maquille.
El presidente del Banco Central, Vanoli,  agregó al respecto que: “Queda claro que Argentina, en cuanto a las políticas contracíclicas y en cuanto a la acción de un Estado que tiende a fortalecer la economía, está dando un ejemplo, no solamente como está encarando la cuestión de la renegociación de la deuda, sino también desde la política macroeconómica así como de la política internacional”.7
Todo lo contrario de la realidad. Devaluación encarecimiento del dólar, techo salarial  cercano al 30% con inflación que llegaría a más del 40%, traducido, rebaja de salarios, precios liberados en productos de primera necesidad, tarifazo por reducción de subsidios en los servicios de agua, electricidad y gas que llegan hasta un 500%, aumento de combustibles y transporte, aumento en las tasas de interés para créditos y lo tan temido por los trabajadores en el capitalismo: miles de suspensiones y despidos, como en las industrias automotrices, metalúrgicas, de alimentación y comercio. Cae la demanda y aumenta la recesión. Casi un calco de medidas propiciadas por el propio FMI.
El Gobierno quiere atraer inversores y mayores préstamos, y arreglar con los buitres malos. Tiene que afrontar el pago de miles de millones de dólares de la deuda externa y responder a un enorme déficit fiscal, que a la fecha es de $156.027 millones8. Y para ello debe continuar con el ajuste que venimos denunciando. La decisión es hacer buena letra ante los organismos financieros, continuar con el pago de la colosal y fraudulenta deuda externa, y endeudarse aún más para beneficio de un sistema capitalista donde los trabajadores y el pueblo sufrimos las consecuencias a cambio de mayores ganancias para las patronales y el sostenimiento de las estructuras burocráticas clientelares del Gobierno.

Notas:
1 Diario La Nación – 09-10-2014
2 “Pari Passu”: un trato igualitario para aquellos bonistas  que entren o no entren a un canje de deuda pública”.
3 4 5 Diario La Nación – 07-10-2014
6 7 Agencia Telam y Web Ministerio de economía (Mecon) – 11-10-2014
8 Diario Clarín – iEco – 19-10-2014