En el exilio forzoso que tuvimos que hacer con varios compañeros, viviendo 4 o 5 años fuera de nuestro terruño, la presencia de Moreno fue decisiva y fundamental para darnos toda la confianza y las posibilidades de desarrollar ese trabajo en equipo que se logró. Nuestra llegada alli fue creo en el mes de julio del 76. Nos instalamos en Bogotá y tuvimos que adaptarnos a sus comidas su lenguaje y sus formas de vida, fuimos a vivir con los compañeros del Bloque Socialista que nos abrieron sus casas , pero como éramos muchos exiliados terminamos viviendo en un complejo de monoblocks al cual les llamamos las torres de ALMA Ata (lugar donde Trotsky había sido confinado en 1927). Leíamos sistemáticamente la prensa local y la historia de Colombia, y aprendíamos de la intervención de la lucha de clases en el país.
Trasladamos a Bogotá la editorial pluma fundada por el PST antes del golpe en Argentina.- convirtiéndose en corto plazo en la mayor editorial trotskista en idioma castellano. En el terreno del periodico, ya fundado el PST colombiano y con la audacia de los compañeros colombianos, logramos impactar a la vanguardia y la izquierda y llegamos a vender 8000 durante la conformación de la Brigada Simón Bolívar.
Allí se incorporaron compañeros muy importantes para la corriente, algunos de los cuales luego vinieron a ayudar a la construcción del partido argentino.
Ya empezados los 80 volvimos, pero tanto yo como Moreno y los otros compañeros consideramos a Colombia como nuestra segunda patria por lo que logramos y como nos ayudaron a transitar el exilio, con errores y aciertos. Pero con gran confianza y fraternidad.