Cárcel a Berni y todos los responsables del ataque de gendarmería que dejó 33 heridos, dos de gravedad.
Hace un mes que los choferes de la 60 vienen reclamando la reincorporación de 53 compañeros despedidos y el cese de la persecución de la patronal contra delegados y activistas gremiales. Para solucionar el conflicto, ante la negativa de la empresa DOTA, actual dueña de la línea, han reclamado una y otra vez “que el gobierno se haga cargo”.
El gobierno de Cristina dio su primera respuesta el martes 28 de julio, con una salvaje represión encabezada por el genocida Berni, con la complicidad de la jueza Sandra Arroyo Salgado, contra los choferes que habían iniciado un corte en 197 y Panamericana desde las 8:00 de la mañana. El resultado fueron 33 choferes heridos por bastonazos, disparos de balas de goma y gases lacrimógenos. Dos de ellos han quedado internados en terapia intensiva.
Esta es la expresión más clara de la política del gobierno kirchnerista de imponer el ajuste al servicio de las ganancias de los banqueros y las patronales. Y al que se resiste, garrotazos. Esta política viene siendo acompañada por el silencio cómplice de todos los candidatos patronales como Massa, Macri, De La Sota y Sanz, demostrando que todos son más ajuste y represión.
Los trabajadores de la 60, acompañados para sus esposas y decenas de luchadores obreros de otras empresas, resistieron valientemente el ataque de la gendarmería. Luego de ser desalojados de la Panamericana se concentraron cortando la ruta 197 hasta las 18 hs.
La represión, transmitida en vivo y en directo por numerosos canales de televisión, ha causado indignación y expresiones de repudio en todo el país. Tanto es así que el gobierno se vio obligado a ofrecer una instancia de mediación en el conflicto, a través del ministro de Seguridad bonaerense, Alejandro Granados. A última hora del martes se supo por declaraciones de delegados de la 60 a los medios que la empresa ofrecería la reincorporación de 47 de los despedidos (argumentando que el resto está en juicio) y negociar el pago de los días caídos. Y quedarían para otra instancia los reclamos del fin de la persecución gremial.
La negociación continúa. Y los trabajadores anunciaron que se concentran en sus cabeceras (Maschwitz, Rincón de Milberg y Constitución) en asamblea permanente, debatiendo los próximos pasos de su plan de lucha.
Desde el PSTU nos solidarizamos con los trabajadores de la 60, como lo venimos haciendo desde el primer día del conflicto. Al mismo tiempo exigimos a las CGT y las CTA que rompan su silencio cómplice con la patronal y llamen inmediatamente a un paro activo en apoyo a los choferes en lucha y para imponer el juicio y castigo a los responsables políticos y a los gendarmes que ejecutaron la salvaje represión, empezando por Berni.
Reiteramos nuestra convicción de que la verdadera solución de fondo para terminar con las continuas provocaciones patronales que llevaron a este conflicto es la estatización de la línea 60 bajo control de sus trabajadores, teniendo en cuenta que la empresa prácticamente se mantiene con los millonarios subsidios del estado.
- -Paro general activo ya de las cinco centrales en apoyo a los choferes de la 60 y en repudio a la represión del gobierno.
- -Reincorporación de todos los despedidos, pago de los días caídos y cese de la persecución gremial.
- -Basta de financiar empresarios parásitos y corruptos con la plata del pueblo.
- -Estatización de la 60 bajo control de los trabajadores.