En ediciones anteriores mostrábamos la realidad de aceiteros en Mendoza, entre otras cosas lo más grave es el incumplimiento del convenio colectivo de trabajo. Pero lo más importante es lo que sucede dentro de la fábrica donde los compañeros están cada vez más aislados y desprotegidos, sobre todo en la fábrica Gabutti (empresa familiar). En la misma este año, la patronal, jugó un papel destructivo para desorganizar a los compañeros imponiendo, mediante el fraude y amenazas, un candidato a delegado a su servicio. Es así como al desplazar a compañeros que luchan como Jaquelina Chacón (ex delegada) esta empresa intenta avanzar en el ataque a los derechos laborales de otras compañeras. Tal es el caso Adriana Mamaní a quien la patronal, abusándose de su embarazo intenta amedrentar (Tanto Adriana como Jaquelina enfrentan un juicio laboral para que se respete el convenio colectivo de trabajo nacional y han estado a la cabeza en la lucha por la reincorporación a compañeros despedidos).
Desde el PSTU nos ponemos a disposición en defensa de estas compañeras para hacer una campaña difundiendo y colaborando con la Federación para que cese esta persecución sobre Adriana y Jaquelina.
En una entrevista con ambas compañeras, nos decían:
Avanzada Socialista: ¿Cómo comenzaron las amenazas de la patronal hacia vos?
Adri: La primera vez me llevaron a la oficina, con el jefe administrativo (la voz de la patronal) intimidándome para que eligiera entre 3 opciones: 1- que desista del juicio y yo podría seguir trabajando en la empresa, 2- que siguiera con el juicio y ser despedida con una propuesta de la empresa, 3- que siguiera con el juicio hasta el final, afuera de la fabrica y cobrar dentro de 4 años o más, chauchas y palitos.
El segundo encuentro fue con Pilar Gabutti, yo estaba muy vulnerable por el fallecimiento de mi hermano y mi embarazo. Ese encuentro fue muy escandaloso: aprovechó que estaba sola (Jaqui ese día no se encontraba en la fábrica) en mi sector de trabajo y me gritó, me amenazó, ensució la memoria de mi hermano, para que desistiera del juicio. Realmente me hizo llorar. Y el último encuentro fue esta semana otra vez con el administrativo ratificando las 3 propuestas de la empresa. Fue más duro que el primer encuentro al cual respondí que voy hasta el final con el juicio y no quiero ningún arreglo. Yo en la empresa me quiero quedar.
Avanzada Socialista: ¿Cómo se están organizando para enfrentar estos atropellos?
Jaqui: Ante la inacción del “delegado” impuesto por la patronal, nosotras empezamos a discutir con los compañeros de la fábrica sobre la necesidad organizarnos en defensa de nuestros puestos de trabajo. Necesitamos unificar nuestros reclamos con otras aceiteras donde están sufriendo los mismos problemas que nosotros (pago atrasado del salario, incumplimiento del convenio, amenazas de despidos, etc). Es por ello que vamos a comenzar una campaña de solidaridad para coordinar nuestra lucha. Creemos que la única manera de lograrlo es organizándonos desde abajo y exigiendo a la Federación que de una vez por todas se ponga a la cabeza de nuestros reclamos.
Así mismo, llamamos a todas las organizaciones políticas de izquierda que nos ayuden en la difusión y campaña en defensa de nuestros puestos de trabajo.
(La foto es de 2015)