El 4 de febrero se cumplieron 35 años del secuestro y posterior asesinato de nuestra compañera Ana María Martínez. El 7/2 se dio un paso adelante en la lucha por el juicio y castigo a sus asesinos con la iniciación formal del juicio. La Comisión de familiares, amigos y ex compañeros de militancia de Ana María realizará un acto en su homenaje el viernes 17/2, del cual participará nuestro partido que apoya e integra la Comisión.
Ana María era militante del Partido Socialista de los Trabajadores (PST) y fue secuestrada el 4 de febrero de 1982 en Villa de Mayo, barrio donde vivía. Su cuerpo acribillado a balazos fue encontrado 8 días después, por vecinos de Punta Querandí, Escobar. Tenía 31 años y estaba embarazada de 3 meses. Era obrera de la metalúrgica DEA, de Villa Adelina y había llegado unos años antes de Mar del Plata, su ciudad natal donde comenzó su militancia, escapando de la represión. Su crimen, que el gobierno militar no logró ocultar, tuvo gran repercusión mediática en ese momento.
Las leyes de Punto Final, Obediencia Debida de Alfonsín y el Indulto de Menem, garantizaron durante décadas la impunidad para los responsables del asesinato de Ana María y de decenas de miles de crímenes de lesa humanidad. Pero la incansable y persistente movilización por el castigo a los genocidas, logró finalmente luego del “Argentinazo” del 2001, hacer derogar y anular las leyes y decretos de impunidad.
En ese marco se formó en 2012 la “Comisión de familiares, amigos y ex compañeros de Ana María Martínez” impulsada por Carmen Metrovich, cuñada de Ana María. La Comisión logró reunir testimonios de vecinos y ex compañeros para la reapertura de la causa. Con el patrocinio del abogado Pablo Llonto, se logró también esclarecer en base a los archivos de la siniestra DIPBA (servicio de informaciones de la policía bonaerense) hoy en manos de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), la responsabilidad del Gral. Ríos Ereñú, entonces jefe de Campo de Mayo (y luego comandante en jefe del ejército con Alfonsín), del destacamento 201 de inteligencia y la policía provincial. Ana María fue señalada por un servicio de la policía, infiltrado en el PST. Uno de los oficiales de inteligencia participantes del operativo es nada menos que el actual fiscal general de Mar del Plata, Fabián Fernández Garello, acusado además del secuestro y tortura de dos militantes comunistas. Ante esto la CPM, junto a otros organismos de derechos humanos ha pedido su juicio político y el inmediato apartamiento de su cargo, reclamo que acompañamos exigiendo además el castigo para este represor.
Sabemos que todos los avances en la lucha por el juicio y castigo de los genocidas son fruto de la movilización y que no podemos tener ninguna confianza en esta justicia patronal al servicio de los gobiernos e infectada de “Garellos”. Esta movilización masiva y lo más unitaria posible es más necesaria que nunca hoy ante los intentos del Gobierno de Macri de hacer retroceder el terreno conquistado, tratando de borrar de la memoria los crímenes del terrorismo de Estado, garantizar la impunidad y rehabilitar a las fuerzas armadas. Desde el PSTU seguiremos como siempre en primera fila en esta lucha fundamental. Pero también creemos que el mejor homenaje a Ana María y nuestros más de 100 compañeros del PST asesinados por la dictadura y las Tres A, es seguir su lucha por la Argentina y el mundo socialista por el que dieron su vida.
Compañera Ana María:
¡Presente! ¡Ahora y siempre!