Todos los años los conflictos de los trabajadores de la educación se reeditan. Los salarios de miseria, la situación de las escuelas, la falta de vacantes, jardines de infantes que no alcanzan, las escuelas primarias, medias, terciarios, universidades, todo el sistema educativo padece el recorte cada vez mayor del presupuesto y los trabajadores de la educación y los estudiantes salimos a enfrentar a los distintos gobiernos de turno.
El proyecto de los organismos internacionales como el BID y el Banco Mundial que, de la mano de los gobiernos, trabajan para intensificar una política: una escuela para pobres y otra para ricos, es permanente, por eso nuestra lucha no puede parar en ese sentido. Grandes conflictos se han realizado a lo largo de los últimos años, y aparte de la exigencia de salarios que alcancen para vivir se lucha por mayor presupuesto para la escuela pública. Los presupuestos nacionales para educación en los últimos años son menores que lo destinado al pago de la deuda externa.
Una conquista
La escuela pública laica y gratuita es una conquista. La privatización de la educación golpea directamente no sólo sobre el control del conocimiento sino que también nos quita una parte de nuestro salario que deberá destinarse al arancel o cuota para que nuestros hijos estudien. Ya la ausencia de jardines maternales y de infantes condena a una gran parte de mujeres trabajadoras a pagar sumas altísimas para el cuidado de sus hijos mientras ellas concurren a su jornada laboral.
Las distintas reformas educativas promueven la privatización de la educación con su consecuente saqueo del conocimiento. Para poder vender educación tienen que apropiarse del conocimiento, intentando embrutecernos, recortando contenidos y materias, eliminando la repitencia en el primer ciclo de la escuela primaria o durante el secundario, como acaba de establecerse en la provincia de Río Negro. Los operativos de evaluación, que se realizar el próximo 18 de Octubre en todo el país, están al servicio de justificar el recorte de presupuesto para las escuelas que saquen menor puntaje. Es decir, toda una batería de medidas en contra de la escuela pública estatal, laica y gratuita.
La conducción sindical de la CTERA no va a fondo ya que ha dejado pasar varias instancias de reformas, así como los dirigentes de la CGT no enfrentan a fondo los despidos ni el pedido de aumento salarial. Por eso, como hacemos siempre nos organizamos “a pesar de los dirigentes”… Los trabajadores necesitamos unir un pliego de reclamos y la defensa de la escuela pública debe ser parte de las reivindicaciones de todos los trabajadores.
Juntos por nuestros derechos
Nuestra patronal es el Estado y la educación pública junto a la salud pública tiene que ser defendida por el conjunto de los trabajadores. Nuestros hijos concurren a la escuela pública en su inmensa mayoría, la educación no es un problema de los docentes solamente, sino de los trabajadores en general.
Resulta imprescindible unirnos al resto de los trabajadores para enfrentar los despidos, luchar contra el tarifazo, impedir los cierres de fábricas y tirar abajo el impuesto al salario al mismo tiempo que exigimos nuestras demandas (aumento de sueldos, apertura de paritarias, etc.) necesitamos unificarnos en una gran movilización que defienda la escuela pública, laica y gratuita. Los docentes y estudiantes, movilizados junto a la comunidad educativa y el conjunto de los trabajadores podemos frenar la reforma educativa que viene por todo y defender así la educación de nuestros hijos y alumnos, obligando al Gobierno a garantizar el presupuesto necesario.