LA LUCHA PARA QUE LOS RICOS PAGUEN LA CRISIS

Desde distintos sectores del oficialismo, se está proponiendo crear una ley de Impuestos a las grandes fortunas. Aunque todavía el proyecto oficialista está en discusión, Carlos Heller, Hugo Yasky y Máximo Kirchner del Frente de Todos, aseguran, con diferentes matices, que con este proyecto se recaudarían cerca de 3 mil millones de dólares y abarcaría a unas 12 mil personas, entre las que se encontrarían fortunas que van desde los 10 mil millones, hasta alcanzar los 60 mil millones de pesos. Ahora bien, ¿ese impuesto es realmente una medida de la magnitud que se necesita frente a la tremenda emergencia en que estamos los trabajadores y el pueblo de este país?

¿“Agrandar la grieta”?

Por supuesto los grandes empresarios, dueños de las grandes fortunas que serían gravadas según el proyecto, no solamente presionan para flexibilizar la cuarentena sin importarles la vida de los trabajadores. También pusieron el grito en el cielo: “Cómo más impuestos”! Al contrario “¡Queremos incentivos a la inversión!” Palabras más o menos dicen sus representantes como Funes de Rioja de la Unión Industrial Argentina y miembro de la central de los empresarios de la Alimentación. En dos notas sucesivas en el diario INFOBAE, el dirigente patronal, asegura que está en contra de “nuevos impuestos” exige que se les “reduzcan las cargas sociales” y facilitar los despidos. Eso sí, reconoce la “colaboración” de los dirigentes sindicales “que están en una actitud dialoguista”, negociando rebajas salariales, despidos y suspensiones, como lo ha hecho Caló de la UOM, entre otros.

Los empresarios del campo con, Carlos Reuteman a la cabeza, fiel representante de ese sector junto a otros senadores, como Romero de Salta, dicen que: el proyecto impulsado por el oficialismo para cobrar un impuesto único a las grandes fortunas “solo agranda la grieta y no ayuda en nada a respaldar el camino tomado por el presidente”. Esos capitales “deben ser fortalecidos para la inversión”.

No está de más aclarar que estos sectores patronales se han llenado los bolsillos y sus cuentas bancarias en el exterior fugando miles de millones de dólares, súper explotando a los trabajadores, pagando salarios miserables, suspendiendo, despidiendo y muchos de ellos viviendo a costa de los subsidios del estado, corrompiendo funcionarios, vendiendo con sobre precios, vaciando y fundiendo empresas para no pagar salarios y justamente son los que ahora están recibiendo toda clase de subsidios y prebendas por parte del gobierno “para mantener el empleo”.

Entonces es natural que estén preocupados por esa “grieta” que pone en evidencia la brutalidad de las desigualdades y el enriquecimiento sin límites de la clase patronal, de un lado y la creciente miseria y pauperización de la clase obrera y sectores populares del otro. Y que a pesar de que “muchos empresarios colaboran” como dice el Presidente Fernández, estos no están dispuestos a ceder ni un mínimo sus ganancias.

Mientras la bronca y resistencia aumentan (como en el Frigorífico Penta, los choferes de la línea 540, los trabajadores de la salud y los movimientos sociales, entre otros)

Todavía el proyecto del oficialismo está buscando consenso en los distintos sectores. Por lo que se dice sería un sector muy pequeño el que pagaría el impuesto (parece que no tocaría en lo más mínimo a los bancos que son de los que más han ganado desde hace muchos años) y dejaría sin resolver el financiamiento de gran cantidad de problemas, como vivienda, nuevos hospitales, salarios dignos a desocupados, incorporación a planta permanente de enfermeras y médicos, etc. En ese marco hay que decir que mientras se debate el proyecto, se siguen pagando y renegociando miles de millones de dólares (250 millones se han pagado en estos días y renegocian el paquete de este año) en concepto de intereses y capital de la Deuda Externa, los ricos y gobierno regatean, por un dólar más o menos de impuesto.

¿Si el gobierno no ha logrado que se cumpla ni siquiera el DNU que prohibía los despidos por 60 días, ni cumple con la ley de Emergencia Alimentaria, cómo hará para hacer cumplir el pago de este impuesto tan limitado?

Necesitamos medidas de fondo para financiar la emergencia obrera y popular

En esta emergencia, cuando la vida de los trabajadores y sus familias están en juego los empresarios hacen lo imposible para obligarnos a ir a trabajar, nos imponen reformas laborales de hecho, con bajas salariales, condiciones de trabajo y horarios., y nos hunden cada vez más en la miseria y la indigencia, para cuidar la vida de verdad, y que los trabajadores y trabajadoras o muramos ni por coronvirus ni por hambre necesitamos medidas acordes con la situación en la que estamos.

Plata hay, comida también, es necesario que por fin paguen esta crisis quienes por años y años aumentaron sus cuentas bancarias millonarias a costa de nuestro trabajo.

Desde el PSTU a la vez que proponemos que esta emergencia se financie:

• Fuertes impuestos a la renta financiera. La ganancia anual de los bancos en 2019 fue de 314.044 millones de pesos
• Eliminación de subsidios a las petroleras. El Estado compensó a empresas petroleras y gasíferas por concepto de devaluación con 24.524 millones de pesos y a las productoras de hidrocarburos con 1550 millones de pesos.
• Impuestos a mineras. La facturación anual 2019 fue de 3900 millones de dólares.
• Aumentar las retenciones a las patronales agrarias. Las ganancias del sector el año pasado fueron: Soja: 4402 millones de dólares Trigo: 1123 millones de dólares Maíz: 1839 millones de dólares Carne bovina de exportación: 3100 millones de dólares.
• Incautar ganancias de laboratorios. La facturación del 2019 llegó a los 221.073 millones de pesos.
• No pagando ni un peso de la deuda externa, ni de intereses ( de los cuales 29.000 millones se deben cancelar este año)

Con estas medidas habría recursos suficientes para destinar todo el presupuesto necesario para enfrentar la emergencia sanitaria; garantizar un ingreso mínimo igual a la canasta familiar para todos y todas; destinar el presupuesto necesario para que todos y todas las estudiantes puedan estudiar de forma no presencial, y todas las medidas que necesitamos en forma urgente los trabajadores, trabajadoras y el pueblo pobre.

19 de Abril de 2020.-