La asamblea universitaria votará una reforma política sobre la elección de las autoridades unipersonales (rector, decano) y, en el Consejo Superior (organismo que gobierna la universidad) donde se incluiría, a través de un consejero nuevo, al Consejo Social Consultivo compuesto por empresarios, organizaciones y burócratas sindicales.
Mucha tela para cortar
La nueva conducción de la Federación Universitaria de Córdoba (FUC), que anteriormente había sido dirigida durante décadas por la Franja Morada, y que ahora está integrada por Libres del Sur-La Bisagra-La Mella, llamó a una asamblea el pasado lunes 7 de noviembre, junto a ADIUC (docentes, CONADU-CTA K), y no docentes. No tenemos recuerdo de hace cuántos años que la FUC no convocaba asamblea.
Desde el PSTU aprovechamos este hecho no sólo para denunciar el plan actual del rectorado, y sino el que se viene, con una futura reforma educativa que devalúa la carrera de grado y que pretende reglamentar las pasantías. También expresamos la falta de democracia en la Federación y el problema de que lancen un “plan de lucha” cuando se están terminando las clases, y que Libres del Sur no fuera convocante a la asamblea, ya que transó con el rector a cambio de un lugar en el Consejo Social Consultivo.
El empoderamiento dice presente en la reforma
La organización feminista MUMALA (Mujeres por la Matria Latinoamericana) perteneciente a Libres del Sur, va a ser miembro pleno, a través de su dirigente Betiana Fasolís, que últimamente se la ve mucho en los programas del multimedio universitario (SRT), hablando justamente del empoderamiento. Y su suplente será la dirigente de Ni una Menos Córdoba, Julieta Fantini, cuya organización si bien se movilizó el pasado 19 O, se negó a ser convocante de la misma argumentando que la marcha “estaba muy politizada”. Estas compañeras parecieran desconocer, que en la UNC ni siquiera se aplica el protocolo contra la violencia hacia la mujer, y que el rectorado permitió el cierre de la Sala Cuna.
Sumemos a las bases
Desde el kirchnerismo, pasando por La Mella y muchas de las agrupaciones de izquierda, nos une el repudio al rectorado, pero el PTS que quiere “delimitarse” de los K para “no quedar pegados”, decidió participar de la asamblea, el resto estamos por la interrupción y porque se realice en época de clases. Sí, hay diferencias sobre cómo debe ser la elección de autoridades, que para nosotros es una persona un voto. Sobre el Consejo Social Consultivo también hay diferencias, ya que allí hay integrantes kirchneristas.
Desde el PSTU impulsamos la unidad en la lucha, creemos que hay que ir a las acciones convocadas por la FUC y por el sindicato docente. Sí, planteamos los límites de las organizaciones dirigentes, ya que en estos días se conoce que los decanos K llevan este tema a la justicia, además de que quieren desdoblar la asamblea universitaria proponiendo que ahora se vote únicamente la elección directa (en realidad es ponderada) para decanos, y más adelante resolver cómo se elige el rector. En caso de que el claustro estudiantil, docente y no docente K, se sentara a dialogar, irían en contra del mandato de las asambleas.
Necesitamos llenar de estudiantes las asambleas, y de la movilización permanente, para tirar todas las reformas de Juri y enfrentar el ajuste de $1000 millones en Ciencia y Técnica, que contempla el presupuesto 2017.