Stonewall Inn era un bar de Estados Unidos, conocido por ser uno de los pocos lugares que aceptaba gays, lesbianas, trans y travestis y donde se hacían fiestas clandestinas, debido al contexto de opresión y persecución policial hacia las personas de la comunidad LGBT en la década de los 60 y al discurso conservador del gobierno de turno. Además a Stonewall iba gente de la comunidad que era pobre e inmigrante y al no tener un lugar para dormir se podían quedar ahí.
El 28 de Junio de 1969, la policía del “Escuadrón de la Moral Publica” de Nueva York allanó el pub revisando a todos, queriendo arrestar a las y los trans y las travestis, porque llevar más de dos prendas del sexo opuesto era delito, y “confiscar” la cerveza entre otras coimas como era habitual. Pero esta vez decidieron resistir y reaccionar a la violencia y el abuso policial con enfrentamientos cuerpo a cuerpo que duraron cuatro días.
Quienes estuvieron al frente de esta lucha fueron las travestis negras, las mujeres lesbianas y los gays latinos, peleando no solo contra la violencia policial y la opresión por ser LGBT, sino también por la opresión al ser negro, pobre e inmigrante que aumentó la bronca, marcando un antes y un después en la lucha y organización por los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales y trans ya que al año siguiente el 28 de Junio de 1970 se organizó la primera marcha Orgullo LGBT.
La lucha por la liberación sexual sigue:
En Argentina, el promedio de vida de los y las travesti y trans no supera los 35 años y la sociedad capitalista que criminaliza romper con el género que se nos impone hace que les quede como única opción de “trabajo” la prostitución. Igualmente se criminaliza a los que elegimos estar con personas de nuestro mismo sexo, siguen habiendo ataques y crímenes de odio contra gays, lesbianas y bisexuales como el de “Pepa” Gaitán, Higui y Ariel Croce entre tantos otros. La ley de cupo laboral trans y travesti sigue sin aplicarse y la lista de exigencias sigue.
Por eso desde el PSTU estamos convencidas de que la pelea por lograr la igualdad de derechos y terminar con la discriminación que sufrimos tiene que ser en unidad, contra todo tipo de opresión, junto a las mujeres trabajadoras que hoy están luchando por el aborto legal, con los inmigrantes que están sufriendo la represión y persecución racista del Estado, con los jóvenes que siguen exigiendo que se implemente la ESI (Educación Sexual Integral) en los colegios y juntos a la clase trabajadora que pelea contra los despidos y tarifazos.
Sigamos exigiendo basta de criminalización y persecución a la comunidad LGTB, aborto legal, seguro y gratuito, separación de la Iglesia y el Estado, implementación del cupo laboral travesti-trans, basta de crímenes de odio, implementación de la ley de Educación Sexual Integral y absolución para Higui, Mariana y Joe Lamonge.