Vamos llegando a La Plata y en una esquina están los auxiliares de las escuelas reclamando para que les reintegren los días de paro descontados. Vamos avanzando y vemos a otro grupo de trabajadores protestando en la puerta del Ministerio de Trabajo pero no llegamos a ver de qué sector son. Llegamos a la Plaza San Martín, frente a la Casa de la Gobernación de Buenos Aires, donde nos concentramos y empezamos a hacer una asamblea para definir cómo vamos a seguir nuestra lucha y en la otra punta de la plaza vemos a otro grupo de trabajadores tocando bombos y tirando cohetes para hacer sentir sus reclamos.
Estamos yendo al Congreso, para marchar a la Casa de la Provincia de Buenos Aires y unirnos a la marcha de todos los estatales y organizaciones sociales a la Plaza de Mayo, y en Once nos encontramos con trabajadores del Ministerio de Trabajo de la Nación. Nos dicen que primero van a hacer un acto con compañeros del Ministerio de Economía y después marchan a Plaza de Mayo.
Volvemos a ir a La Plata, a llenar las mismas calles que días antes se colmaron de estudiantes exigiendo el boleto educativo gratuito. Es la quinta vez que vamos. Esta vez nos unimos a los trabajadores judiciales de la Provincia, marchamos por las calles del centro y fuimos a exigir a Maria Eugenia Vidal que nos diera el aumento que corresponde, a gritarle que no vamos a aceptar un 15% en cuotas.
Los reclamos de los residentes
Además, los residentes (1) fuimos a plantear nuestros reclamos, somos en la mayoría de los casos los que cubrimos la falta de personal en el sistema público de salud y los que más atendemos a la población. Pero lo hacemos en forma precarizada, pues no cobramos asignaciones familiares, ni tenemos aportes jubilatorios, y somos contratados como becarios, no como trabajadores de planta. Y ahora Vidal pretendió recortar 400 cargos de la residencia, los cargos docentes.
Así Vidal no solo quería dejar a 400 personas sin trabajo sino también hacer que miles de residentes que debemos terminar de formarnos para brindar a la población una buena calidad de atención no tengamos docentes que nos enseñen cómo hacerlo. ¡Con la lucha logramos que ese número bajara a 150!
Ya vamos más de un mes de paros, movilizaciones, asambleas, volanteadas, radios abiertas, entrevistas en los medios, charlas en la sala de espera con la gente, cientos de fotos subidas al facebook y canciones. Exigiendo aumento de sueldo, insumos, infraestructura, más personal, reincorporación de los despidos, todo para defender nuestros derechos como trabajadores y para defender la salud pública, gratuita y de calidad.
El vaciamiento del Estado
Pero esta situación no es solo la del sistema de salud. La realidad nos mostró en cada paso que dimos en la organización y la lucha, que son miles los trabajadores que están peleando, y solo pudimos ver a los de la provincia de Buenos Aires, pero desde Tierra del Fuego hasta Santiago del Estero los trabajadores estamos resistiendo el plan de ajuste del macrismo.
En estos meses entre Macri, Vidal y los gobernadores K como Rosana Bertone en Tierra del Fuego, echaron a más de 41.000 trabajadores del Estado (2). En el Ministerio de Trabajo echaron a 270, en la Universidad Nacional de La Matanza despidieron a más de 150 estudiantes precarizados que trabajaban en los programas Ellas Hacen y Argentina Trabaja, en el Hospital Posadas dejaron sin trabajo unas 600 personas y pretenden echar más, en la Subsecretaria de Juventud del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación despidieron a 55 trabajadores, y la lista podría seguir.
De esta forma, están terminando de destruir la salud y la educación públicas y vaciando los pocos programas sociales que existían. Esto es así porque a nuestros gobernantes poco les importa lo que nos pase a los trabajadores, si no tenemos trabajo para alimentar a nuestras familias o si ya no se puede acceder al sistema público de salud y la gente se termina muriendo de enfermedades curables como la tuberculosis. Macri, Vidal y compañía gobiernan para aumentar las ganancias de empresarios como ellos, por eso le sacan las retenciones a las multinacionales del campo y dejan aumentar los precios.
Un problema mundial
Pero esto no pasa solo acá, pasa en Brasil donde la presidenta Dilma Rousseff está imponiendo un ajuste brutal, pasa en Francia donde millones, obreros y estudiantes como en el Mayo Francés, salen a la calle a enfrentar la reforma laboral del primer mandatario, Francois Hollande.
Y esto pasa porque en todo el mundo hay un mismo sistema, el capitalismo, un sistema que se basa en que un puñado de empresas, que manejan la economía mundial, buscan enriquecerse a costa del hambre y la miseria de la mayoría de la población dejándolos sin trabajo o pagándoles sueldos de indigencia. Y los gobiernos recortan y recortan presupuesto estatal para pagar la deuda externa y cumplir con los bancos yanquis.
Enfrentar el ajuste
Para derrotar el plan de ajuste de Macri y de los empresarios, los trabajadores debemos dejar de reclamar en cada esquina por separado. Es urgente que sigamos presionando a las conducciones sindicales para que, de una vez por todas, profundicen la pelea.
Debemos impulsar la lucha en la más amplia unidad, entre todos los trabajadores no solo del Estado sino también del sector privado porque ahí es donde les duele, cuando les afectamos la producción, las ganancias millonarias de las multinacionales.
(1) – Los residentes somos trabajadores de la salud que terminamos las carreras universitarias y hacemos las especializaciones (ginecología, traumatología, pediatría, etc.) en hospitales y centros de salud.
(2) – Dato extraído del Observatorio de Derecho Social de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) Autónoma, quienes aclaran que se trata de un subregistro porque muchos trabajadores no logran hacer públicos los despidos.