Hace más de un año, en las páginas de Avanzada Socialista (Nº50) denunciábamos el anuncio hecho por Cristina Kirchner del decreto 929/13 de inversiones petroleras, y el acuerdo de YPF con la multinacional yanqui Chevrón un día después.1
Con la aprobación en el Congreso, el 30 de octubre pasado, de la nueva Ley de Hidrocarburos, se extienden las condiciones del acuerdo YPF-Chevrón para Vaca Muerta a todo el país. En palabras del Gerente Institucional de YPF, Gonzalo López Nardone, “¡¡Bienvenido el proyecto de ley si genera más Chevrón!!”.2
Una ley que entrega más que la dictadura
El Gobierno ha salido a defender esta nueva ley3, argumentando que la ley anterior había sido sancionada por un gobierno militar4.
Pero tan cierto como esto es que esta nueva ley del kirchnerismo entrega aun más que la ley de Onganía de 1967. ¿Un ejemplo?: Con esta nueva ley las empresas tendrán el derecho a comercializar libremente en el mercado externo una parte de la producción de hidrocarburos sin retenciones a las exportaciones y se garantiza la libre disponibilidad del crudo mientras se la libera del pago de impuestos. Si antes ese beneficio se daba a quienes presentaban un plan de inversión de 1.000 millones de dólares ahora lo es a partir de los 250 millones de dólares. Si antes este beneficio se aplicaba a partir del quinto año, ahora es a partir del tercer año.
Una “entrega” al servicio de otra “entrega”
La privatización de YPF en los 90, el saqueo y la desinversión de las multinacionales -que continuó durante la “década ganada” hasta que Cristina se “avivó” después de 9 años de gobierno K que Repsol nos estaba estafando- son la causa de la pérdida del autoabastecimiento energético. En 2013, Argentina se vio obligada a importar energía (combustibles, gas oíl, gas licuado) por USD 14 mil millones.5
La dependencia del imperialismo aumentó. No solo las multinacionales petroleras han extraído compulsivamente petróleo y gas sin hacer nuevas inversiones exploratorias, sino que actualmente estamos obligados a comprarles energía por miles de millones.
Cristina profundiza la política de los 90, promulgando este acuerdo con Chevrón y la Ley de Hidrocarburos.
Pero esta política en materia energética es solo un mecanismo de sometimiento que va de la mano de otro mecanismo fundamental: la deuda externa.
Ante las exigencias de pago de los buitres de la deuda, el Gobierno ya está buscando la forma de derogar leyes y establecer negociaciones que le permitan pagar en enero todo lo que los buitres quieren. Y para eso necesita tener dólares.
Por eso es que hipoteca nuestro petróleo y demás recursos naturales por más de 30 años.
¿Es esta la soberanía de la que nos habla Cristina?
Abajo la Ley “Chevron” de Hidrocarburos. Estatizar sin pago y con control obrero
Tomemos en nuestras manos la pelea para recuperar la soberanía. La pelea por nuestro salario debe ir junto con el enfrentamiento al imperialismo que es quien da las órdenes. Por eso, en cada lucha incorporemos la pelea para tirar abajo la Ley de Hidrocarburos y por la estatización sin pago y con control obrero de todos los recursos naturales.
Notas:
1 http://nuevo.http://nuevo.pstu.com.ar/wp-content/uploads/2014/09/trotskyarchivo.jpg.com.ar/wp-content/uploads/2014/09/as50.pdf
2 http://www.clarin.com/opinion/mirada-cambios-ley-Hidrocarburos_0_1225677467.html
3 http://www.telam.com.ar/notas/201408/73585-de-vido-hidrocarburos.html
http://www.agenciapacourondo.com.ar/secciones/economia/15811-ley-de-hidrocarburos-no-es-chevron-estupido.html
4 En 1967 por la dictadura de Onganía.
5 http://www.ambito.com/noticia.asp?id=727875
6 de noviembre de 2014