Necesitamos el paro general de la CGT y la CTA

En los últimos días, ambas CTA lanzaron la convocatoria a una marcha federal contra el ajuste del gobierno de Macri.
Ante los brutales ataques que venimos sufriendo los trabajadores con la inflación, los tarifazos y los despidos, Yasky y Micheli (líderes de las dos CTA) parecen despertarse de su letargo y, obligados por sus bases, convocan a una medida en todo el país para fin de agosto y primeros días de septiembre.
Por el momento solo consiste en actos y movilizaciones, sin el paro general que necesitamos y sin ningún plan de continuidad.
Pero los trabajadores, la juventud, los estudiantes, las mujeres trabajadoras, etc. debemos tomar la convocatoria a la marcha federal en nuestras manos para organizarnos en nuestros lugares de trabajo para participar de las jornadas en todo el país, exigirle a todas las centrales que convoquen al paro y transformar esas jornadas en una expresión unificada de lucha contra el ajuste del gobierno de Macri.

El ajuste en números

El hambre y la desesperación entre los trabajadores y el pueblo pobre crecen. Las suspensiones y despidos se multiplican, tanto en la industria privada, como en los servicios públicos y el Estado.
Según cifras de consultoras, en los primeros 6 meses del año se han contabilizado 180000 despidos y suspensiones, una cifra que se incrementa mes a mes.
Los sectores que pudieron conservar su trabajo ven a diario como su salario cada vez vale menos. Mientras las paritarias, en su gran mayoría, cerraron cerca del 30% (la mayoría en cuotas extendidas), la inflación ya superó ampliamente esos aumentos y se comió de un saque los aumentos salariales. El poder adquisitivo en lo que va del año se redujo un 4% si tomamos el mejor acuerdo paritario de este año (aceiteros: 38%). Para el resto de los gremios, la pérdida es mucho mayor.
Según el propio Ministro de Hacienda y Finanzas, Prat Gay, la inflación anual trepó al 42%.
Por otro lado, el empleo precario alcanza al 57% de los trabajadores, siendo las mujeres y los jóvenes los más afectados, quienes a su vez tienen un 20% menos de posibilidades de conseguir un trabajo en blanco, según un estudio de la UCA (Universidad Católica Argentina).
Este cuadro de despidos, inflación y tarifazos significa que aumenta el hambre y la miseria, y que un 33% de la población está por debajo de la línea de pobreza, es decir, que tienen ingresos por debajo de la canasta básica ($11680).

La unidad de la CGT

El reparto de los casi $30000 millones que anuncio Macri para las obras sociales es el premio para los dirigentes sindicales que se han dedicado a las negociaciones para la unidad de la CGT en lugar de ponerse a la cabeza de los reclamos de los trabajadores.
Sin embargo, la bronca de los trabajadores y la necesidad de salir a pelear se van acumulando junto a la crisis política del Gobierno amenazan y hacen crujir el pacto de “gobernabilidad” al servicio de que pase el ajuste (ver páginas centrales)

Paro general para poder marchar en todo el país

Por eso, tenemos que exigirle más que nunca a la CGT que la primer medida que salga del 22 de agosto (día en que está prevista sellar la unidad de las centrales) sea la convocatoria a un paro nacional en todo el país para que los trabajadores podamos sumarnos y movilizarnos en todas las provincias a la Marcha Federal, que llegará a Buenos Aires el 2 de septiembre a Plaza de Mayo.
De la misma manera, las dos CTA también deben romper su tibieza y llamar a parar para que los trabajadores podamos sumarnos masivamente.

Organizarnos en los lugares de trabajo

La marcha federal es la oportunidad que tenemos hoy todos los trabajadores de unificar los reclamos y responder todos juntos al plan económico de Macri. Tenemos que tomarla en nuestras manos.
Desde el PSTU nos ponemos al servicio de esa tarea y llamamos a todos los trabajadores a realizar y/o exigir asambleas en todos los lugares de trabajo para organizar cómo participamos y votar la exigencia de paro para reclamar la reapertura de paritarias y el fin de los despidos. A los desocupados y a todos los sectores que sufrimos los aumentos y la inflación a movilizarnos en todo el país y acompañar la marcha con cacerolazos, ruidazos y cortes para tirar abajo el tarifazo.
Los ataques al salario, los despidos, el tarifazo, la judicialización de los luchadores obreros y populares, de las mujeres trabajadoras y pobres, el vaciamiento de la escuela y la universidad pública, responden al mismo plan económico de Macri al servicio del imperialismo y el FMI.
Ante ese plan, los trabajadores necesitamos la unidad para luchar, obligando a los jefes sindicales a que rompan la tregua con el Gobierno o pasando por encima de ellos, para golpear unidos por todas nuestras reivindicaciones con un Paro Nacional y una gran Marcha Federal.


Necesitamos nuestra propia salida 

Los trabajadores no podemos esperar que la salida para que la crisis no la paguemos los trabajadores venga de los partidos patronales que siempre gobernaron a favor de los empresarios, las multinacionales y los amos yanquis. Tenemos que construir nuestra propia salida, y para ello proponemos algunos puntos fundamentales

1- Romper las cadenas de la dependencia, NO al pago de la deuda. La dictadura le dejó al FMI y los buitres internacionales un “regalito” y a nosotros nos encadenó hasta el día de hoy. Todos los gobiernos que vinieron después (Alfonsín, Menem, De la Rúa, los K y Macri) aceptaron esa estafa y nos siguen condenando. Mientras más pagamos, más debemos. Es hora de terminar con esta sangría diciendo NO al pago de la deuda y destinando esos miles de millones de dólares a salud, trabajo, vivienda, educación y combatir la violencia contra la mujer.

2- Trabajo para todos, no a los despidos. Salario igual a la canasta familiar. Es mentira que las empresas despidan por no tener más plata, lo que pretenden es mantener o aumentar sus ganancias. Veamos las ganancias capitalistas acumuladas: plata hay para repartir las horas laborales entre todos los compañeros, sin achique salarial alguno. Trabajemos menos, pero todos. De toda empresa que no aplique esta medida, el Gobierno debe hacerse cargo pero estatizándola sin pago a la patronal. Y bajo control obrero de la producción y las finanzas, para garantizar todos los puestos. Y hacer un plan de obras públicas a costos adecuados a las necesidades obreras y populares.

3- Terminar con el saqueo. Reestatización de todos los recursos naturales. Para recuperar y defender nuestra soberanía como pueblo hay que recuperar los sectores más importantes de la economía, hoy privatizados. El petróleo, el gas, la industria pesada, los bancos, la tierra y los alimentos deben ser estatizados sin pago y puestos a producir bajo control de los trabajadores. De este modo podremos garantizar la producción de alimentos baratos y de buena calidad para todos, el cuidado del medio ambiente, fomentar el impulso de la industria, la verdadera soberanía energética y evitar los manejos corruptos de los funcionarios.