Sobre Autovía Norte y a muy poca distancia del estratégico Aeropuerto Internacional de Neuquén la base militar yanki intenta asomar.
El proyecto se autorizó en 2012 pero se frenó por la polémica desatada en el Chaco donde se denunció que se trataba de bases militares.
Igual que la base chaqueña fue autorizada por el entonces gobernador Jorge Capitanich, la sede neuquina fue autorizada por el gobernador de Neuquén de aquellos años, Jorge Sapag, bajo el gobierno nacional del kirchnerismo acompañando la entrada de Chevrón tras un acuerdo secreto que se votó con un herido de bala tras una represión en la legislatura. Tanto con Obama como con Trump la política de recolonización sigue intacta.
Hoy, con Macri vuelve a meterse con toda la arremetida yanqui para instalarse. La desmalvinización, el pedido de perdón al Rey de España, el ARA San Juan, la autorización de las bases norteamericanas es parte junto a la política económica, con despidos tarifazos, devaluación, etc. la entrega de soberanía adquiriendo aún más deuda externa y sometiéndonos al dictamen del F.M.I es parte de la profundización de ese plan de sometimiento.
La movilización contra las bases yankis, al calor de las luchas nacionales y la pelea que el movimiento obrero, los estudiantes, trabajadores y trabajadoras organizados por la pela contra el ajuste, el aborto legal, los derechos femeninos, y el repudio de la llegada del G-20, hja dado su fruto.
Preveían levantar en la meseta una construcción donada por el Comando Sur de Estados Unidos, pero producto de la lucha que denunció que el lugar lo usará Estados Unidos con fines militares, el gobierno anunció que la obra se encuentra paralizada.
La movilización del conjunto de los trabajadores y trabajadoras del país, la unidad del movimiento obrero y el estudiantado, la lucha contra los despidos y el repudio al los líderes imperialistas del G-20 deben unirse en una sola voz y pegar en unidad con un gran paro nacional, en el camino de luchar por la segunda y definitiva independencia, unir Latinoamérica contra los planes y recetas del imperialismo y hechar a sus representantes de todo pelaje como Macri acá en Argentina u Ortega en Nicaragua que aplican las mismas recetas y reformas a pedido de Trump.