NO AL SERVICIO CÍVICO DE BULLRICH

Por Nazarena Giles  – Candidata a Diputada Provincial Primera Sección Pcia. de Buenos Aires 

Bajo la resolución N° 598/2019 publicada en el Boletin Oficial,  se estableció la creación del Servicio Cívico Voluntario en Valores, a cargo dela  Gendarmería Nacional. 

El anuncio del Gobierno Macri supone una propuesta para los Jóvenes NI-NI y alcanzaría a los pibes de entre 16 y 20 años que no estudian ni trabajan y que recibirán una “capacitación en valores” por parte de las Fuerzas Armadas. La prueba piloto de este servicio iniciaría en septiembre de este año, con 1200 jóvenes que serán conejillo de indias de esta política. Participarían de un taller una vez por semana en 6 diferentes dependencias en Buenos Aires, Santiago del Estero, Córdoba y Río Negro.

 

Jóvenes NI-NI: los postergados por todos los Gobiernos

En el mundo los jóvenes que no estudian ni trabajan representan un 13%. Sin embargo, en nuestro país, son un 25%. Eso significa que de cada 4 pibes y pibas, 1 no tiene posibilidad de trabajar ni acceder a educación. 

Esta situación la conocemos bien. Desde que intentamos insertarnos en el mercado laboral, este es expulsivo. Nos someten a entrevistas donde hay 500 postulantes más. Pasamos de trabajo precario a trabajo precario. No tenemos derechos laborales ni posibilidad de sindicalizarnos. Tener un trabajo en blanco actualmente, es casi un sueño. Una parte nos la rebuscamos, terminamos trabajando inclusive casi como esclavos, como por Rappi, Glovo. Otro tanto termina en manos del narcotráfico en los barrios, y muertos víctimas del Gatillo Fácil, legalizado bajo este Gobierno. 

La Escuela Pública está devastada. En el día de hoy los secundarios se movilizan no solamente porque aplican las reformas que pide el Banco Mundial, sino también porque no hay estufas. La deserción aumentó a escalas alarmantes, sobre todo en la educación superior. Es que la universidad pública es tan pública como un supermercado. Podés entrar, sí, pero para poder llevarte un título va a requerir de años de esfuerzo y dinero. Los apuntes, el transporte, el tiempo, todo conlleva un gasto que los pobres y los trabajadores muchas veces no podemos afrontar, y terminamos dejando. 

No al Servicio Cívico de Bullrich…

La educación no puede estar en manos de quienes asesinaron a Santiago Maldonado. De quienes patrullan y reprimen en nuestros barrios. 

No existen fuerzas armadas “democráticas”, como lo quiere demostrar Bullrich con la gendarmería brindando instrucción cívica. Esta fuerza y el resto de las mismas son parte del aparato represivo, y bajo este tipo de Estado y Gobierno, solo sirven a quienes nos gobiernan. 

Cabe destacar que políticas similares ya las vimos bajo el gobierno K, cuando la gendarmería junto a La Cámpora “ayudaba” a los inundados de La Plata y Bonafini se abrazaba con el genocida Milani. 

Este pueblo no olvida ni perdona, y por lo tanto, no se reconcilia con las fuerzas armadas, en las que aún hay asesinos de la última Dictadura Militar. 

…Sí a la Instrucción Militar

Por otro lado, este anuncio abrió el debate sobre si es necesario o no el Servicio Militar, aunque no sea precisamente lo que propone el Gobierno. “Conscripción, sí, pero hecha por nosotros mismos” decía Trotsky. Polemizando con los pacifistas en 1940 escribía: “No podemos oponernos al entrenamiento militar obligatorio por parte del estado burgués así como tampoco podemos oponernos a la educación obligatoria por parte de ese mismo estado. El adiestramiento militar aparece ante nuestros ojos como parte de la educación. Debemos luchar contra el estado burgués, contra sus abusos en este terreno como en otros.” (…) “El adiestramiento militar universal sólo puede facilitarnos la creación de las guardias de defensa obrera”.

Es que el monopolio de las armas esta bajo el Estado burgués, y no tenemos manera de defendernos de ellos si no aprendemos a usarlas. Así como no podríamos aprender a leer y a escribir si no tuviéramos educación pública, aunque sea burguesa, y la defendemos de todos los ataques que vayan en su contra. Entonces, defendemos la conscripción sí, para hombres y mujeres, pero hecha por nosotros, como dice Trotsky. Por seis meses, con salario igual a la canasta familiar, sin ningún tipo de maltrato y con el adiestramiento impartido en los sindicatos, colegios y universidades.

Salir del FONDO con medidas de fondo

Durante años fuimos los jóvenes quienes tomamos en nuestras manos el cuestionamiento a las políticas de ajuste. Junto a los trabajadores fuimos parte activa de la lucha contra la reforma previsional así como también protagonizamos rebeliones educativas y la lucha por el aborto legal. Creemos que tenemos que salir a la calle para enfrentar la política represiva y hambreadora del gobierno.

Precisamos cambios de fondo, para arrancar de raíz la desocupación y ganar acceso a educación. Así como para dejar de morir en manos de la policía en los barrios, del narcotráfico y las redes de trata. Ese cambio no va a venir de las variantes patronales que nos proponen talleres con la gendarmería y sumisión  pintada de renegociación y Pacto Social al Fondo Monetario Internacional que pide mas ajuste para nosotros. 

Necesitamos una revolución Obrera y Socialista, que ponga en pie un gobierno de trabajadores. Sin un Plan de Emergencia de empleo para los jóvenes, sin acceso irrestricto a educación pública, masiva y de calidad nuestro presente no va a poder cambiarse. Todas las variantes patronales prometen futuro pero ya han demostrado que nos terminan dando hambre, miseria y represión. Solo con nuestro propio gobierno podemos llevar adelante las medidas para asegurarnos el verdadero futuro. Rompiendo con el FMI, dejando de pagar la deuda externa y colocando ese dinero para generar empleo y acceso a educación pública al servicio de los trabajadores.