other

¿Nuestro futuro al servicio de quién?

El pasado 15 de junio, Macri anunció con bombos y platillos el lanzamiento de un Plan Nacional de Juventud para terminar con el desempleo. Este consiste en la creación de “Casas del Futuro” en donde se dictarían cursos de oficios de seis meses, para jóvenes de entre 15 y 24 años. Estos cursos tendrían el objetivo de capacitarnos para ser más “competentes” en el mercado laboral. 

Una propuesta que suena “linda” pensando en cómo cuesta conseguir laburo siendo joven. Los despidos avanzan y somos los primeros en ser echados. Para colmo si conseguís otra cosa, probablemente sean solo tres meses y después te rajan. O si estudias, cada vez la seguís pensando si vas a poder continuar, en función de que laburo consigas. La realidad es que nuestro corto paso por el mundo es la excusa perfecta para ser la variable de ajuste. Y los que sufren un salto en su precarización son las mujeres, los extranjeros y los LGBT, teniendo aún peores trabajos y sufriendo los peores maltratos. Nos preguntamos ¿Es este plan la solución?

El remedio peor que la enfermedad

El Plan Nacional de Juventud que propone Macri se complementaría con la Ley del Primer Empleo ¿Que plantea esta ley? Es más que nada una continuidad del polémico acuerdo con Mc Donalds, el cúal permite a la empresa incorporar jóvenes con contratos de 4hs con un salario de $4500, una miseria. También tiene antecedentes en la región, como es el caso de la ley Pulpín, en Perú, promovida por el gobierno de Humala, que con la excusa de combatir el desempleo juvenil acrecentaba la precarización que sufrimos en nuestros trabajos. Tan evidente fue esto que la ley tuvo que ser derogada después de grandes movilizaciones.
Estos proyectos presentados por el Gobierno Nacional hacen parecer que la culpa del desempleo es pura y exclusivamente nuestra, por no estar capacitados o carecer de experiencia. Lo que busca este plan es poner nuestro futuro al servicio de los empresarios. Que seamos mano de obra barata y prescindible. Y como el plan que no nos están diciendo es que quieren que la educación sea un negocio al que solo accedan quienes puedan pagarlo, nosotros nos tendremos que arreglarnos con cursitos y talleres de 6 meses.
La otra pata del plan continúa con el ataque a la educación pública. Irónico es que mientras se anuncia este plan que incluiría talleres artísticos, las escuelas y universidades de arte se caen a pedazos y muchas ni siquiera tienen edificio propio. Mientras se mantienen los contratos por tres meses, los despidos avanzan y la inflación y los tarifazos se comen el poco dinero del que disponemos. Estudiar se convierte en un privilegio y más cuando las universidades carecen de los fondos necesarios para funcionar.

Pongamos nuestro futuro en nuestras manos

El gobierno de Macri demostró ser totalmente servicial a los empresarios. Claramente no está en sus planes ninguna medida que perjudique a estos para terminar con el desempleo juvenil. Para frenar sus planes de ajuste contra nosotros e imponer nuestra alternativa, tenemos que salir a luchar. Organizarnos en las escuelas y universidades, como lo están haciendo las artísticas (ver nota en link abajo). Organizarnos en los lugares de trabajo. Siempre junto al resto de los compañeros. No hay división que valga acá. Hay que unificarnos efectivos y contratados, despedidos y los que siguen trabajando, compañeros y compañeras, de todas las nacionalidades, orientaciones sexuales y de todas las formas, colores y tamaños. El gobierno PRO-Patronal de Macri viene por nuestro futuro, y solo nosotros podemos recuperarlo y ponerlo a nuestro servicio si nos organizamos juntos para enfrentar esta situación.

Nota Bellas Artes: 

http://nuevo.http://nuevo.pstu.com.ar/wp-content/uploads/2014/09/trotskyarchivo.jpg.com.ar/la-emba-no-se-achica-se-organiza-y-defiende/?preview=true&preview_id=5920&preview_nonce=18ccd0d887