PARA GARANTIZAR EL ACUERDO CON EL FMI EL MASSAJUSTE

A semanas de asumir como “Superministro de Economía”, Sergio Massa confirma que el Gobierno está a favor de un mayor y brutal ajuste económico para cumplir con el FMI. Y para ello nombró Secretario de Planificación Económica a Gabriel Rubinstein, un economista con ideas muy similares al liberalismo macrista, basadas en reajustes a los trabajadores. Massa y Rubinstein ya planifican viajes a EE.UU. este mes, igual que Alberto Fernández y otros funcionarios, para hacer buena letra ante inversores y fondos buitre y conseguir más préstamos aumentando la Deuda Externa, con la excusa de fortalecer Reservas del BCRA.  Mientras tanto, ya ordenaron disminuir las partidas presupuestarias para salud, vivienda, educación, salarios estatales, jubilaciones, planes sociales, etc.

 

Gabriel Rubinstein, integra una consultora económica ligada al establishment patronal. Fue Director Ejecutivo de la Bolsa de Comercio y representante del Banco Central durante la gestión de Roberto Lavagna y el gobierno de Néstor Kirchner, participando de las negociaciones en 2005 con el FMI y los acreedores de la Deuda Externa (Fondos Buitre), deuda nunca investigada y aceptando condiciones leoninas para el país en intereses y vencimientos.

 

Varias frases de Rubinstein muestran su pensamiento: (…) Si hacés una apuesta fuerte al capitalismo y la economía crece, la recaudación va a crecer y se podrían contener los gastos de muchas maneras: congelando vacantes, haciendo que los salarios crezcan menos que la inflación en el sector público, que sabemos que es muy redundante en gente, especialmente en las provincias” (…)  “Yo proponía que para compensar la ayuda por el COVID-19 se bajen los sueldos públicos un 25% en toda la administración nacional, provincial y municipal” (…) “Hay que contener y salir de este esquema de apretar a las empresas, que no puedan echar gente, que tengan que pagar doble indemnización” (Revista Forbes, octubre 2020). Al estilo Macri: “En primer lugar, la idea del reformismo permanente, no sólo en lo económico, me parece muy buena. Obliga a avanzar, mejorar y profundizar las reformas, contemplando tiempos de asimilación en la sociedad y la política». (Ámbito, diciembre de 2017); (…) El grave error del gobierno de Macri de otorgar salarios a los estatales (empezando con los docentes de Buenos Aires) muy por encima de lo compatible con las metas de inflación»…. “Y tiene que haber una reforma en jubilaciones. No puede ser que dé lo mismo aportar o no”. (Forbes, octubre 2020).

Un perfil reaccionario, antiobrero y propatronal. Rubinstein fue puesto por Massa, o sea el gobierno peronista de los Fernández, bajo la intervención directa de Cristina. Viene a ejecutar el brutal plan económico a favor de las grandes patronales argentinas e internacionales para agrandar sus ganancias y garantizar al FMI bajar el déficit fiscal para el pago de la Deuda Estafa Interna y Externa.

———————————————————————————————-

 

A EE.UU. PARA ENDEUDARNOS MÁS

 

Alberto Fernández visitará los EE.UU., promocionado por su embajador, Marc Stanley. El plan es contactar a organismos internacionales de crédito, como el propio FMI y el Banco Mundial. Además de inversores privados, como dos bancos yanquis, uno inglés y fondos buitre de Qatar y Arabia Saudita. Pero con ciertos condicionamientos crediticios como aceptar tribunales extranjeros en caso de litigios y atrasos en pagos.

 

Según Sergio Massa se podrían conseguir unos U$S 1.300 millones de inversores y, paradójicamente, algo más del FMI. Tratará de demostrar que nuestro país es confiable y que el objetivo principal es tener reservas en dólares en el raquítico BCRA, y garantizar que se puede pagar Deuda, efectuando ajustes económicos dolorosos a la población. La realidad es que la Deuda argentina es impagable, pero el negocio de estos usureros y estafadores son los intereses, capitalizarlos y aumentar la Deuda, y así profundizar la dependencia de las condiciones expuestas por los capitales extranjeros, principalmente de EE.UU.

 

Apenas nombrados Massa y Rubinstein se renegociaron unos 2,4 billones de pesos por vencimientos en agosto, septiembre y octubre., a seis meses y con una tasa del 70% anual. Negocio redondo para los inversores buitre, ya que además, se les aceptó una cláusula de ajuste por inflación o tipo de cambio. Con tasas usureras inexistentes en el resto del planeta. 

 

Formas de subir también la Deuda Interna dolarizada. La Deuda del Estado Central a julio llegó a los U$S 380.000 millones, y con las Leliqs, deudas provinciales y empresas estatales supera los U$S 500.000  millones. En 2022 se pagarán o refinanciarán alrededor de U$S 47.000 millones. Por otra parte es escandaloso lo adeudado por bonos y letras Leliqs del BCRA, unos 7 billones de pesos (unos U$S 50.000 millones) que se les siguen renovando a inversores buitre como Black Rock, Pimco y Templeton.

 

¿No es hora de una gran movilización para poner un freno a esta estafa de la Deuda que crece en progresión geométrica a costa del sufrimiento de los trabajadores y el pueblo? Macri, Alberto y Cristina están pensando en las elecciones 2023. Solo un verdadero gobierno de los trabajadores le puede poner fin a esta cruel política antiobrera.

 

 

LAS MEDIDAS DEL “SUPERMINISTRO”

 

Detrás de los intentos de incrementar la Deuda descriptos en la nota anterior, están las medidas de ajuste impulsadas por el gobierno peronista de los Fernández, su superministro Massa y su viceministro Rubinstein. Todas para cumplir con el acuerdo con el FMI que prevé un déficit fiscal del 2,5%. Medidas que tienen un solo objetivo: contar con recursos para poder pagar por lo menos los intereses usureros a los acreedores especulativos, porque el capital es imposible de cancelar.

 

La inflación de agosto se proyecta en un 7% llegando a septiembre al 52% aproximadamente y la anual proyectada 2022 a más del 90% este año. En el capitalismo argentino, se es pobre bajo los $120.000.- e indigente bajo los $54.000.- según las dudosas cifras del INDEC. Del Gobierno no emana ni una sola medida seria, que beneficie a los trabajadores ocupados y desocupados y jubilados, para defenderse de la inflación que originan las patronales y especuladores financieros. Por el contrario, profundizarán estas medidas:

Tarifazos:  con una supuesta segmentación difícil de comprobar, millones de hogares, empresas y comercios, recibirán aumentos en energía eléctrica, gas y agua, por la eliminación de subsidios y además de aumentos en el boleto de colectivos y subterráneos. Factores de mayor inflación.

Salario Mínimo Vital y Móvil: todo trabajador no puede ganar menos de esta cifra. Entre Gobierno, sindicatos burocratizados y patronales acordaron que  llegue recién en noviembre a $57.900.  Hipócrita e irrisorio cuando la Canasta Básica total  llega a los $120.000.- Paralelamente congelamiento de los planes sociales.

Reducción de gastos en ministerios: Unos  $128.000 millones. Con congelamiento en la planta de personal y sin ingresos en empresas públicas.

Reducción de giros a las provincias: afectaría obras, las jubilaciones de los sistemas que no se adecuaron al ANSES y salarios de empleados.

Reducción y cambios en el esquema de importaciones: en una economía dependiente de la tecnología extranjera al limitarlas, se afectará el normal funcionamiento de procesos productivos fabriles. 

Educación: $ 50.000  millones menos  y comprende al Programa Conectividad-  Conectar Igualdad (-$ 30.000 millones)Fortalecimientos de Jardines Infantiles (-$ 15.000.000) e Infraestructura y Equipamiento (- $ 5.000 millones). 

 

Salud: Recorte de $ 10.000 millones en el Programa “Prevención y Control de Enfermedades Transmisibles e Inmunoprevenibles”. Achique de $ 9.000 millones al Programa Adquisición y Suministro de Vacunas y Covid. Se afecta además la programación de asistencia a discapacidades de la población que ya vienen con atrasos en el cobro de los salarios asistenciales.

 

Obras Públicas: un recorte de $20.000 millones por gastos e inversiones en capital y recursos hídricos.

 

Jubilaciones: Aparte del 15% de aumento en septiembre para las jubilaciones, a los haberes mínimos se dará un bono por $7.000.- por tres meses y de $4.000.- hasta dos haberes mínimos. Convalidando la tendencia de este Gobierno y anteriores de ir achatando la escala de jubilaciones acercando a la miserable mínima a aquellos millones que aportaron toda su vida.

 

Salarios: establecer negociaciones para que los aumentos salariales privados, y principalmente los estatales, estén por debajo de la inflación.

 

 

 

 

 

BENEFICIOS PARA  CAPITALISTAS

 

En cambio, para los capitalistas hay beneficios de excepción, mirando para otro lado ante la inflación que generan:

A los capitalistas agropecuarios: se les permite vender su producción y se los incentiva al no liquidarla en pesos al tipo de cambio oficial dentro de los 5 días, y obtener una “nota” en dólares que pueden cambiar por pesos en un plazo mucho mayor, 180 días. Plazo en que pueden especular con más devaluaciones y cobrar intereses. Están negociando un dólar oficial especial de $200.- para la exportación de soja.

A las mineras: las empresas tendrán acceso libre al dólar por hasta un 25% de sus exportaciones, a cambio de supuestas inversiones y agregado de valor. El objetivo es obtener más dólares. Se buscará inversiones privadas para la explotación de litio permitiendo el transferir divisas al exterior relacionadas con sus ganancias.

A las empresas automotrices: las que aumenten sus exportaciones pagarán 0% de derechos de exportación por mayores ventas al exterior. Hasta el 31 de diciembre de 2022, terminales automotrices y autopartistas solo pagarán derechos de exportación hasta el monto facturado en 2020 (4,5% o 3%, según corresponda).