La industria petrolera mundial está en una gran crisis que ya ha dejado en el mundo 120.000 despedidos, 120.000 familias en la calle por la avaricia de los empresarios.
No podemos permanecer pasivos, cuando todos los días vemos como estas mismas multinacionales quieren aplicar el ajuste también a los petroleros del país, cuestión que no solo afecta al sector petrolero, sino que también a los pueblos a quienes se le han recortado las regalías por la crisis.
Nos obligan a realizar más tareas con el mismo salario y se ha “desvinculado” trabajadores, mientras la producción de petróleo ha aumentado tanto en Chubut como Santa Cruz. Las refinerías están operando a casi la totalidad de su capacidad, y se desarrolla una monumental operación en Vaca Muerta.
Pero este contraste de producir más con menos gente, se agrava con que el estado subvenciona el barril interno, mientras todos los trabajadores argentinos pagamos uno de los precios más altos del mundo de naftas, con el IVA y el impuesto al salario.
Mientras a los obreros petroleros les descuentan entre 6 y 8 mil pesos por mes de impuesto al salario, a las operadoras se subvenciona pagando el barril más alto que el precio internacional: 66 dólares barril Escalante, 77 barril Medanito.
La crisis la provocan los empresarios y la pagan los trabajadores y el pueblo. Por eso este 12 de diciembre, en vísperas del feriado por el Día del Petróleo, tenemos que juntarnos los que decimos NO a tanta entrega, tenemos que juntarnos los que estamos cansados que nos saqueen nuestros recursos naturales las multinacionales como la inglesa PAE o la yanqui Chevron.
Nos reuniremos los petroleros y todos los sectores que quieran que los hidrocarburos y toda la industria petrolera y del gas pasen a manos del Estado y bajo control de los trabajadores.
Sabemos que el próximo gobierno, gane quien gane, será incapaz de estatizar toda la industria, que, como ya se pudo ver con el actual gobierno, no avanzará por una YPF 100% estatal que expropie los yacimientos, refinería, almacenes y la distribución de las demás multinacionales que nos saquean.
Por la estatización de toda la industria petrolera bajo control obrero; por jornadas de 8 horas en los yacimientos, para así generar nuevos empleos, sin reducción salarial; por políticas que eviten la contaminación y para que la riqueza generada sea distribuida para hospitales, escuelas, acueductos y viviendas. Este 12 de diciembre será un gran paso.