El PSTU lanzó candidatos a las elecciones para defender un programa obrero y socialista para el país.
Un programa para garantizar la atención de las demandas necesarias para asegurar vida digna para los trabajadores y el pueblo pobre –salud, educación, vivienda, transporte, jubilación, reforma agraria, empleo y salario digno para todos. Para asegurar el respeto a los derechos de las personas LGBT, el fin de la discriminación y del machismo contra las mujeres, y del racismo contra negros y negras. Que ponga fin a la violencia y a la criminalización de la pobreza y de las luchas de los trabajadores y de la juventud obrera.
Un programa que, para alcanzar estos objetivos, avanza en medidas para poner fin al control que los bancos, las contratistas, las multinacionales y las grandes empresas tienen sobre nuestro país, pues esta es la única forma de acabar con la injusticia y la desigualdad.
El segundo turno de las elecciones será disputado por dos candidaturas que no defienden este programa. Aécio Neves, del PSDB es representante directo de los bancos y de las grandes empresas que controlan el país. Su gobierno sería la expresión clara del retroceso, de la vuelta de un gobierno que, como Fernando Henrique Cardoso (FHC), privatizó, entregó el patrimonio del Brasil a las multinacionales y atacó duramente los derechos de los trabajadores. De gobiernos como el de Geraldo Alckmin de San Pablo y el de Anastasia en Minas Gerais, que tienen como respuesta única a las demandas de los trabajadores, del pueblo pobre y de la juventud la brutalidad policial.
La continuidad del gobierno del PT, con Dilma Rousseff, tampoco va a traer los cambios que los trabajadores y la juventud brasileños quieren para tener una vida mejor. Sabemos de la expectativa y de la esperanza que aún tiene por estos gobiernos una parte importante de la clase trabajadora. Pero, después de 12 años de gobiernos petistas, es necesario reconocer que este partido ha gobernado privilegiando los mismos intereses que el gobierno anterior. Al buscar una alianza con los bancos y las grandes empresas para gobernar (representados por los Sarneys, Collors y Maluffs de la vida), el PT no cambió ni va a cambiar el país.
La Bolsa Família, presentada como prioridad del gobierno petista, pues está destinada a combatir la pobreza, conlleva cerca de 24.000 millones de reales del presupuesto del país, por año. La “Bolsa Banqueiro” –recursos públicos que salen del mismo presupuesto para engordar las ganancias de los bancos y los especuladores del mercado financiero– llega a 900.000 millones de reales por año. O sea, la prioridad, de hecho, siguen siendo los bancos y no los pobres.
Por el contrario, con la desaceleración de la economía, a la que estamos asistiendo –el PIB del país va a crecer menos de 1% este año–, lo que está en preparación por el próximo gobierno, sea comandado por Dilma o por Aécio, es más ataque a los derechos de los trabajadores. Lo que está en preparación es el aumento del precio del combustible (y el aumento de los precios, que viene en cascada cada vez que aumenta el combustible), aumento de la tarifa de luz, continuidad de las privatizaciones, como el reciente remate del Campo de Libra; lo que se prepara es más subsidio para los bancos y las grandes empresas, y no medidas que impidan el crecimiento del desempleo que se avecina con la crisis que va tomando cuenta de la economía brasileña.
Los trabajadores y la juventud no deben hacerse ilusiones con estas candidaturas o con el resultado de las elecciones. Deben prepararse para la lucha en defensa de sus derechos e intereses, sea cual fuere la candidatura vencedora del segundo turno de las elecciones.
El PSTU cree, como dijimos en el primer turno, que el voto es un gesto político, fortalece a quien lo recibe. Y –por todo lo dicho arriba– nuestra opinión es que no podemos fortalecer ninguna de las alternativas que están disputando el segundo turno. Por esta razón, nuestra opinión es que el voto correcto en el segundo turno es el voto nulo, y es esta opinión la que damos a los miles de trabajadores y jóvenes que nos acompañaron en la primera fase de las elecciones. Respetamos, obviamente, la opinión de todos y todas, pero queremos dejar clara nuestra opción por el voto nulo y las razones por las cuales lo hacemos.
Saludos socialistas
Zé Maria, presidente nacional del PSTU
San Pablo, 8 de octubre de 2014.-
Traducción: Natalia Estrada