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Preparar el enfrentamiento a las primeras medidas del Gobierno

Luis Caputo, el flamante Ministro de Economía, ha anunciado las primeras medidas del nuevo Gobierno capitalista al mando de Javier Milei. Las mismas representan lisa y llanamente un ajuste brutal a las condiciones de vida de las y los trabajadores: una devaluación de casi el 120%, quita de subsidios acompañada de aumentos en las tarifas de energía y transporte, congelamiento de la obra pública que se traducirá en una catarata de despidos. Las bases para la estanflación (estancamiento económico con alta inflación) que venían anunciando.

El llamado ajuste a la “casta política”, no fue tal. Tan sólo la reducción de ministerios y el despido de empleados públicos vendrá de la mano con recortes a salud, educación, ciencia y tecnología. Nada de bajar los sueldos de los ministros, jueces, diputados, los altos mandos de las fuerzas armadas.

No se quedan ahí. Ahora buscan mandar un proyecto de ley al Congreso para atacar las jubilaciones, o modificación de aumentos por decreto directamente. Y también planean dar marcha atrás con la anulación del Impuesto a las Ganancias, algo irónico del Gobierno que decía que iba a terminar con los impuestos. Ni los aumentos anunciados en la Asignación Universal por Hijo (AUH) o la tarjeta Alimentar ayudan un poco a reducir los daños de este paquetazo de ajuste. No mienten, estaremos peor.

Todo con la excusa de bajar el Déficit Fiscal ¿Para qué? Para los compromisos con el FMI, el Club de París y toda la bandada de buitres. Una “pesada herencia” en la que el propio Caputo tiene una enorme responsabilidad, de cuando era ministro de Mauricio Macri.

Dicen que no hay plata, que es para evitar una hiperinflación. Pero los que venimos perdiendo poder adquisitivo somos los trabajadores y las patronales obtienen cada vez más ganancias. Pero la verdad es que tenemos un país lleno de recursos. Las petroleras están teniendo ganancias récord con Vaca Muerta. Y tenemos una parte importante de las reservas de litio más grandes. El problema es que las multinacionales se la llevan toda, y acá dejan tierra arrasada.

Por una respuesta unificada frente al plan de Milei, Macri y el FMI

Una declaración de guerra de la medida que acaba de lanzar el Ministro Caputo requiere de una respuesta contundente de las y los trabajadores, y el pueblo. Hoy estamos dispersos, con algunos sectores reclamando salarios, enfrentando despidos, etc. Muchas compañeras y compañeros votaron con expectativas a este Gobierno. Otros no, pero se sienten derrotados, y están enojados con quienes sí lo votaron. Las conducciones sindicales hasta ahora no dan signos de movimiento.

Si queremos garantizar tener comida en la mesa, tenemos que romper esa división. Quienes estamos en contra de este plan de hambre, tenemos que ir a buscar a los que están confundidos, que serán golpeados por las nuevas medidas. y empezar a preparar la lucha que necesitamos. Reclamar aumentos de salarios que alcancen la canasta familiar y sean indexados de acuerdo a la inflación, que no haya ni un despido. Ir a los grandes supermercados, a los frigoríficos a reclamar alimentos. Exigiendo que sean los dirigentes los que se pongan a la cabeza de esos reclamos, y si no lo hacen, prepararlos nosotros, por abajo. Con reuniones y asambleas por lugar de trabajo, en los barrios, en las universidades, para organizar ésta respuesta tan necesaria.

El que las hace las paga” dice el Gobierno, con Patricia Bullrich en el Ministerio de Seguridad. Así anuncian que habrá represión. Por lo que tenemos que prepararnos para defendernos, como hicimos el 18 de diciembre de 2017 contra la Reforma Jubilatoria de Macri. Gesta por la que siguen condenados Daniel Ruiz, Sebastián Romero y César Arakaki. Hoy el reclamo de absolución se vuelve más necesario que nunca.

Por un Plan Alternativo de los trabajadores.

¿Cómo terminamos con esta crisis? El Gobierno peronista anterior nada hizo para resolverla y la potenció, y éste solamente viene a empeorarla. Aunque las medidas sean distintas, tipo “shock”, y los impactos sean de distinta medida, ambos terminan gobernando para los bancos, los empresarios y las multinacionales.

Es la hora de algo verdaderamente distinto. De que impongamos un plan alternativo de los trabajadores y el pueblo. Anulando todos los pagos de la Deuda Pública fraudulenta, especialmente del del FMI y todos los buitres. Expropiando las principales empresas del país para ponerlas a funcionar bajo control de los trabajadores. Echando a todos los bancos privados especuladores, para tener una banca única nacional y estatizada. Controlando el comercio exterior, para decidir que se va del país y que no, y terminar así con la fuga de dólares.

Hay que terminar con estos ciclos de Gobiernos de distintos colores que arruinan cada vez más el país. El pueblo trabajador necesita construir una herramienta para llevar esta tarea adelante. El PSTU te invita a que la construyamos juntos. No faltará oportunidad: este 20 de diciembre, a 22 años del Argentinazo que tiró abajo a Fernando de la Rúa, estaremos en las calles llevando esta propuesta.