Se acerca otra vez una nueva votación y muchos jóvenes en todo el país nos preguntamos a quién votar en estas PASO. Y es que en una realidad cada vez más negra para todos los trabajadores, la juventud es la que más palos vienen comiendo desde que Macri gobierna y esto nos empuja cada día más a un futuro sin ninguna perspectiva.
Los más precarizados
El gobierno Nacional fue muy claro a la hora de ofrecernos posibilidades para “insertarnos en el mundo laboral”; trabajar para McDonald’s por 4500 pesos, hacer pasantías por 4000 pesos o directamente gratis para las empresas (la revolucionaria expo Empleo Joven) o poniéndonos “cervecerías artesanales” en los barrios del conurbano.
Mientras tanto cada vez que salimos a tirar curriculums vemos más cantidad de pibes que la vez anterior, si tenemos la suerte de poder vivir solos hacemos malabares para llegar a fin de mes calculando cada peso que vamos a gastar por día, y si seguimos en la casa de nuestros viejos hay que ayudar porque estamos todos en la misma y eso nos aleja cada día más de la posibilidad de independizarnos.
Ahora también hay que sumar la última novedad, la nueva reforma laboral que están impulsando donde nos dicen que como nuestra generación va a vivir 200 años lo más lógico es que trabajemos muchos más años de nuestra vida, pero sin vacaciones pagas, sin indemnizaciones o seguros de desempleo y sin sindicatos para organizarnos y pelear por nuestros derechos.
Amenazan nuestra educación
Estudiar y trabajar se volvió un esfuerzo que cada día menos podemos hacer, porque la mayoría de nuestros laburos son de 8hs o más, con apuntes cada vez más caros, sin comedores, sin guarderías para las madres y con un boleto educativo apenas limitado a los estudiantes secundarios, que dicho sea de paso, con la nueva escuela secundaria, buscan sacarles las pocas materias de contenido que les quedan para mandarlos a las empresas a desarrollar “proyectos”, que en criollo significa, ser mano de obra barata de empresarios amigos.
Mujeres jóvenes, carne de cañón
Y encima de todo esto, a las mujeres nos siguen matando, secuestrando o violando, no podemos salir solas a la noche, no podemos irnos de viaje solas, mientras Vidal, Michetti y cada uno de los funcionarios se llenan la boca hablando del Ni una menos, pero las pibas nos seguimos muriendo y cada día es una nueva Anahi, Micaela, Camila y tantas otras que se nos fueron.
Ni un pibe menos
En los barrios la policía cada día está más envalentonada, nos bajan del colectivo para revisarnos, nos piden el documento, nos llevan por estar tomando una cerveza en la plaza, y a los pibes que salen a afanar por que no tienen para comer los quieren meter presos desde los 14 años, mientras hay cada día nuevos casos de gatillo fácil y los policías que matan son absueltos, reincorporados e indemnizados por el estado, como paso con el caso de Kiki Lezcano.
El voto es contra el plan Macri y sus cómplices
Porque todo esto es lo que significa este gobierno para la juventud; hambre, miseria y cada vez menos oportunidades. Por eso debemos votar rechazando este plan antiobrero que viene aplicando, y para ello, ni Cristina, Massa o Randazzo son opciones, ya que cada uno de ellos, a su forma, fue sostenedor y garante para que el gobierno pudiera avanzar con su plan, votándole las leyes en el congreso o aplicando el mismo ajuste y represión en las provincias que gobiernan. Los tres coinciden en bajar la edad de la imputabilidad e incluso siguen vendiéndonos frenando las movilizaciones de los trabajadores contra Macri, convenciéndonos que debemos “castigar” al gobierno solo en las urnas y esperar hasta 2019 para sacarlo, mientas siguen echando gente en todos lados, los salarios cada vez alcanzan menos y el hambre crece en todos nuestros barrios.
Los jóvenes tenemos solo una opción en estas elecciones y es votar al Frente de Izquierda y de los trabajadores, que somos los que hemos estado en la lucha contra el ajuste de Macri en las calles, que estuvimos ante cada lucha de los trabajadores cuando cierran una fábrica o despiden gente a mansalva, que tenemos un programa de ruptura con las multinacionales, de dejar de pagar la deuda externa y poner esa plata para trabajo, salud y educación. Que la crisis no la paguemos nosotros.
El FIT lleva en sus listas a los que enfrentamos el gatillo fácil, a los que nos oponemos a la baja de la imputabilidad, los que defendemos una educación pública de calidad y al servicio del pueblo trabajador, los que en cada lugar de trabajo luchamos por salarios que alcancen y que no queremos ninguna reforma laboral que nos haga trabajar hasta morir, además de ser las que realmente decimos Ni una menos porque no queremos ser las próximas en no volver a nuestras casas.
Y por eso que entre nuestros candidatos están los que han sido participes de las principales luchas contra el ajuste de este gobierno, como nuestro compañero Germán Tonero de la General Motors. Por todo esto te pedimos que le des tu voto a los que día a día salen a bancarla junto a vos, los que son tus compañeros de trabajo o de estudio, que votes trabajadores y no a los que año a año nos vienen dejando cada vez con menos.
Pero no somos ingenuos, sabemos muy bien las elecciones no van a resolver ninguno de nuestros problemas, y por eso tenemos que seguir movilizados, empujando un nuevo paro general para parar los despidos y suspensiones, contra la reforma laboral y la reforma de la escuela media.
Porque si este gobierno lo único que tiene para los trabajadores es miseria y palos, entonces tenemos que sacárnoslo de encima, no para que gobierne Cristina o Massa que tampoco defienden nuestros intereses, sino para que gobernemos los trabajadores y los sectores populares. Para esto, debemos organizarnos en nuestros trabajos, en la universidad o la escuela y en el barrio para tirar abajo a este gobierno de los ricos y empresarios, que a los jóvenes no tiene nada bueno que ofrecernos.
Por todo esto, además de pedirte que nos votes este domingo, además te ofrecemos nuestra organización, el PSTU, para que demos juntos esta pelea para intentar cambiar este sistema de mierda que no nos ofrece ninguna posibilidad de nada.