Finalmente, el “super” año electoral llegó a su fin. Luego de un profundo debate político que alcanzó todos los niveles hay un nuevo presidente y un nuevo ciclo político comienza en la Argentina. A tono con lo que sucede con los gobiernos “frentepopulistas” latinoamericanos, el giro a la derecha iniciado por el gobierno de Cristina Kirchner con la implementación del ajuste fue castigado en las urnas beneficiando al candidato que desde el propio gobierno fueron construyendo a lo largo de la “década ganada”.
Nace un gobierno débil políticamente que “tomó prestado” la mayoría de los votos que cosechó. Sólo el 24% de los votos obtenidos en las elecciones primarias puede considerarse como propios. El resto lo votó esencialmente como un instrumento para impedir un nuevo gobierno kirchnerista. La paridad del resultado final, la minoría del bloque gubernamental en las cámaras parlamentarias, la crisis económica y la necesidad de aplicar el ajuste que el imperialismo exige preanuncia un nuevo “pacto de gobernabilidad” entre el PRO(Cambiemos), el FPV y el PJ disidente.
Con la excusa de la “herencia recibida” y la mentira del “mandato popular que dieron las urnas” estos partidos preparan una nueva trampa que esconde otro ataque a las condiciones de vida de los trabajadores. ¿Cómo responderá la clase obrera y el pueblo a estos ataques? ¿Ha surgido una nueva alternancia política al peronismo luego del 2001?¿Qué pasará con el kirchnerismo en la oposición? Las respuestas a estos interrogantes irán aclarando el panorama.
Si bien la polarización dio un bajo porcentaje, la campaña por el voto en blanco fue la única postura que planteó una perspectiva clara de cara a lo que se viene. Con Scioli o con Macri, los trabajadores siempre hubiésemos resultado perdedores. Los primeros discursos luego del domingo confirman que no había diferencias de fondo entre ambos candidatos.
No hay tiempo para lamentarse. Es momento de organizar la más amplia unidad de todos los que quieran luchar contra el plan de ajuste, entrega y represión que está en marcha y vienen a profundizar. Desde el PSTU, te invitamos a que discutamos estas primeras conclusiones y nos pongamos a trabajar juntos para responder a los nuevos desafíos que la realidad política de nuestro país nos plantea.
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