Charlamos con el camarada Roberto Balcázar, militante del PSTU y trabajador petrolero de la empresa DLS en la Cuenca del Golfo San Jorge.
AS- ¿Contanos que pasó con tu situación laboral?
R-Fui despedido de la empresa DLS el pasado 28 de Julio en una maniobra persecutoria y fraudulenta de la empresa, invocando una justa causa totalmente injustificada, a tal punto que nada dicen en el telegrama de despido del por qué de la misma. Es parte de la ofensiva de todas las operadoras y del Gobierno, de su política de disciplinamiento, apriete y persecución a los que luchamos y estamos en contra de la adenda, la flexibilización y la entrega.
Para ello con la colaboración de los delegados y miembros de comisión directiva del Sindicato de Petroleros Privados Chubut ya que no fueron a fondo pidiendo mi reincorporación, ante la negativa de la empresa. Fue toda una definición política donde dejaron correr el despido por todas las diferencias que vengo teniendo con ellos, como por ejemplo los despidos de los 75 compañeros que echaron en enero de este año a los cuales tampoco defendieron y el motivo fue el solo hecho de ser activistas de otras listas sindicales que existieron en la elección del sindicato en noviembre del año pasado, así como también el rechazo que opuse a la aprobación de la adenda donde entregaron nuestro convenio colectivo, adenda que había rechazado públicamente en una asamblea general de la empresa, donde además fui aplaudido por todos los compañeros presentes.
Estas posiciones públicas mías fueron al parecer las determinantes, sobre todo porque algunos dirigentes no pudieron justificar ante la base la entrega que estaban haciendo quedando al descubierto la tremenda agachada y traición.
AS-No debe ser una sorpresa la actuación de esta manera de la burocracia sindical ¿verdad?
R-Para nada y es un poco lo que conté antes. A modo personal molesta la actitud de compañeros que hoy son miembros de la Comisión Directiva gracias al apoyo que tuvieron de mi parte y de varios compañeros más y hoy me dieron la espalda, ni siquiera llamaron a ver que necesitaba; parece que se olvidaron de tantas cosas que logramos juntos en la empresa, de cuantas reuniones compartimos donde ellos siempre escuchaban y decían que aprendían, pero al parecer lo que nunca aprendieron fue a tener firmes convicciones y a no dejarse doblegar por el poder o por un simple puesto en el sindicato. Y algunos todavía tienen la cara de presentarse a candidatos a diputados como lo hace Leandro Moyano de la directiva del gremio en listas del FPV–PJ de la mano de Loma Ávila, diciendo que van a defender los puestos de trabajo; el único puesto que defienden es el de ellos y sus prebendas, sacándose de encima a muchos que piensan diferentes o no son del palo permitiendo la persecución política e ideológica por parte de las empresas. AS-¿Lo ves como un ataque más dentro del plan de ataque del Gobierno y las patronales? R-Exacto. Esto que hoy me pasa no es ajeno a los que están viviendo muchos compañeros como es el caso de los trabajadores de SP, SAI y también los de Tecpetrol por citar ejemplos recientes de despidos, disciplinamiento y ataque a las condiciones de trabajo en los yacimientos y que en todo el país se expresa en los despedidos y reprimidos de PepsiCo, AGR, General Motors, o aquí mismo en la región los compañeros de Guilford , Pepsi Trelew, Sederías Dalí o Cerámica San Lorenzo y otros tantos que están resistiendo el ajuste a toda la clase obrera por parte de los gobiernos y patronales que cuenta con el aval de conducciones que se entregan y no luchan .
AS- ¿Querés agregar algo más?
R-Sí, quiero agradecer a todos los cumpas que se solidarizaron y quisieron dar pelea por mi reincorporación. A ellos y a todos los petroleros y al conjunto de la clase trabajadora les digo que esto no termina, que la lucha continúa y que hay que seguir organizándose para frenar este avance patronal que nos quiere arrebatar tantas conquistas que hemos conseguido y que hasta ahora lo vienen logrando; pero cuidado: todo tiene un límite y esto tiene que explotar. Ya son más de 2.500 puestos de trabajo que hemos perdido en los yacimientos de la región y cerca de 9.000 en todos los yacimientos y es por eso que tenemos que pararle la mano a Macri, a las operadoras, a los gobiernos provinciales que también nos mandan la gendarmería y las fuerzas de la represión y a la cómplice dirigencia sindical. Basta de despidos, de adenda, de flexibilización, persecución ideológica y represión y para eso debemos luchar y confiar solamente en nuestra fuerza organizada.