El 26/1 los compañeros decidieron en asamblea iniciar un paro indeterminado, ante el nuevo incumplimiento del plan de pagos de salarios adeudados. Tres meses de atraso, obras sociales cortadas, dos años sin los aumentos por paritarias y con 50 despidos y “retiros voluntarios” que redujeron a la mitad el personal sobrecargando sus tareas y multiplicando los problemas de salud y el intento empresario de llevarse máquinas…
Por todo esto votaron también ir a la UOM Avellaneda a reclamar apoyo efectivo y un urgente Congreso de Delegados que resuelva un plan de lucha que unifique los más de 40 conflictos de metalúrgicas, contra el ajuste patronal encabezado por Macri. Organizándonos así, eligiendo delegados que se pongan al frente de nuestras necesidades y se disciplinen a las asambleas de base, coordinando entre fábricas, solidarizándonos con luchas como la de AGR, lograremos romper el aislamiento, el desgaste y la desmoralización a la que nos quieren llevar los directivos sindicales. Que sólo hacen escraches con delegados y pretenden convencernos de que la única “salida” ante los despidos es cobrar las indemnizaciones, como en Banghó o Stockl…
Redepa es una de las plantas del grupo Alco-Canale, que busca “reestructurarse” para aumentar su productividad y ganancias. Recibió 150 millones de pesos del Fondear (Fondo para el Desarrollo Económico Argentino) para “reactivar”, pero la patronal siguió vaciando. ¡Que el estado garantice los salarios y les cobre a estos estafadores, embargándolos! Debería hacerse cargo de estas empresas, bajo control de sus trabajadores. Exijamos a la UOM y el STIA (alimentación) que lleven adelante esta propuesta, en lugar de gestionarles créditos estatales o buscar otros “inversores privados” que nos dejan en la calle o trabajando en peores condiciones, como en Cresta Roja.