Sobre el Intento de detención a Hebe de Bonafini

Desde estas páginas venimos alertando sobre el avance represivo que impulsan desde el gobierno nacional, la justicia y los gobernadores provinciales. Esto obedece a una necesidad de las patronales para imponer su plan de ajuste. Como parte de esta escalda, el gobierno viene realizando cambios en la política hacia los derechos humanos (ver página 10) aprovechando el “bastardeo” que la década kirchnerista le brindó a la lucha democrática más importante que dio nuestro pueblo contra el genocidio de la última dictadura militar. En ese contexto, sin dudas el intento de detención de Hebe de Bonafini fue uno de los hechos más importantes de las últimas semanas, generando infinidad de polémicas entre los trabajadores y luchadores por los derechos humanos.

Sólo las organizaciones obreras y populares podemos alcanzar la verdad sobre la corrupción en “sueños compartidos

Este fue el título de nuestra declaración en su momento. Esto es así porque no confiamos en esta justicia, ni le reconocemos autoridad para juzgar a Hebe de Bonafini, que durante muchos años estuvo a la cabeza de la lucha por los derechos humanos.
Recientemente, la Corte Suprema dio ejemplos de su justicia, poniendo límites al derecho de huelga, haciendo de pata judicial al ajuste que está llevando adelante el Gobierno de Macri.
Esta justicia, que de justa solo tiene el nombre, solo ha condenado a una ínfima cantidad de genocidas, no se ha pronunciado por el secuestro y asesinato de nuestra compañera Ana María Martínez, y ha procesado por luchar a más de 7000 trabajadores en los últimos años.
A esto hay que agregarle que hace pocos días una movilización en La Plata evitó que le dieran el beneficio de prisión domiciliaria al genocida Etchecolatz.
Por eso, estamos en contra del planteo que el Partido Obrero manifestó a través de Nestor Pitrola cuando dijo que “Hebe debe avenirse a declarar para que se investigue la malversación de $1200 millones contra los sin techo, los albañiles y el Estado”.
Desde el PSTU sostenemos lo que decíamos en nuestra declaración: “para poder saber la verdad sobre lo acontecido en “Sueños compartidos” proponemos que se conforme una comisión investigadora independiente compuesta por organizaciones obreras, sociales y de DDH que se hayan mantenido en la lucha en forma independiente del Estado en los últimos años, como por ejemplo las cientos de organizaciones que componen el Encuentro Memoria Verdad y Justicia”. Creemos que Hebe de Bonafini debería plantear lo mismo.

¿Hebe sigue defendiendo los Derechos Humanos?

Hay un profundo debate alrededor de esta cuestión. El llamado a indagatoria y el intento de uso de la fuerza para que declare se dan en un contexto de ajuste y represión a los trabajadores, donde el Gobierno quiere avanzar sobre los derechos de organización y huelga, como intenta hacer con el Pollo Sobrero y los trabajadores del Sarmiento.
Esto se da luego de que Macri volviera a sacar al ejército a la calle para que desfile por Buenos Aires el Día de la Independencia, junto al rey de España y Aldo Rico. En el mismo sentido van las nefastas declaraciones de Macri respecto de la dictadura (ver página 10).
Por eso, no es casualidad que hayan ido a buscar a Hebe el mismo día que se iba a realizar la ronda número 1999. Sin dudas hay un intento del Gobierno de golpear símbolos de nuestras luchas, para avanzar con su ideología y política de derecha, tratando de reconciliar a las fuerzas armadas con el pueblo que salió a la calle a decirles que se vayan.
Sin duda para gran parte de la población, el intento de arresto a Hebe es un ataque a un símbolo de los derechos humanos. Sin embargo, nosotros, al igual que Nora Cortiñas, opinamos que Hebe “No está requerida por un tema de derechos humanos, sino por su rol de empresaria”. Su relación con el gobierno kirchnerista la puso en el entramado de corrupción.
Es distinto al caso de Milagros Sala por ejemplo, que fue arrestada por manifestarse en una Plaza. A Hebe no la quieren indagar por estar luchando contra el ajuste de Macri o el desprocesamiento de los mas de 7000 luchadores procesados, ni por la libertad de los Petroleros de las Heras que están con cadena perpetua.

Por eso, consideramos equivocada la posición de los kirchneristas y la declaración conjunta que sacó el PTS, Nuevo Mas, MST, TPR, PRC, Correpi y otras organizaciones, donde dicen que fue “una verdadera provocación contra la histórica lucha contra la represión y la impunidad y las libertades democráticas más elementales.”

Nosotros creemos que Hebe bajó las banderas cuando apoyó al Gobierno de Néstor y Cristina Kirchner, aceptando millones de pesos, callándose la boca frente a todos los atropellos de ese gobierno a los trabajadores y el pueblo. Como decíamos en el 2011: “Los casi 800 millones de pesos de fondos públicos para ser manejados discrecionalmente por la Fundación, sin licitaciones ni controles, para la construcción de viviendas, empujaron a una organización que debía consagrarse a la lucha en defensa de los derechos democráticos a dedicarse a montar empresas y organizar negocios del cual, la Fundación Sueños Compartidos era parte que dedicaba a gestionar.


La necesidad de mantener la independencia política frente al Estado

Las Madres de Plaza de Mayo son un emblema de la lucha contra la dictadura, pero su relación con el Gobierno significó un profundo golpe a la lucha por los derechos humanos.
Pero no queremos lanzar acusaciones al aire, por eso les mostramos a continuación los números que indican la cantidad de genocidas juzgados en los últimos 12 años:
“Solo alrededor del 36% del total de los 2000 procesados desde 2003 fue llevado a juicio, y un 27% de ese número de procesados fue condenado. Si tomamos como dato los 600 centros clandestino de detención que funcionaron en todo el país durante la dictadura, los 519 condenados siguen representando a casi 11 años de anuladas las leyes de impunidad, menos de 1 represor por centro de detención. (1)
Es claro que más allá de los discursos, el avance contra la impunidad fue a paso de tortuga durante el gobierno Kirchnerista.
A pesar de esto, Hebe dejó de hacer la Marcha de la Resistencia, porque según ella el enemigo no estaba más en la Casa Rosada.
No hubo lucha de las Madres por la aparición con vida de Julio López, es más, Hebe dijo que “no es un típico desaparecido” y dio a entender que su desaparición podría ser parte de una maniobra destinada a perjudicar al Gobierno. (2)
Lamentablemente, Hebe de Bonafini no salió a pelear contra el Proyecto X, la Ley Antiterrorista, ni defendió a los más de 7000 mil luchadores procesados, y apoyó al represor Milani como jefe del Ejército, pero repetimos, esta justicia no tienen la autoridad para juzgarla.
Por eso, sostenemos que el Juicio y Castigo a los genocidas sigue siendo una tarea pendiente que solo podremos lograr con la movilización y la lucha contra todos los gobiernos de turno. Más allá de las diferencias políticas con los trabajadores kirchneristas, peronistas, radicales, o que votaron a Macri, seguiremos en las calles peleando codo a codo con ellos, por la aparición con vida de Julio López, el desprocesamiento de los más de 7 mil trabajadores procesados, por el esclarecimiento del secuestro y asesinato de Ana María Martínez y seguiremos peleando contra la Ley Antiterrorista, la Ley Antipiquetes y todos los ataques a los derechos humanos.

1) http://argentina.indymedia.org/news/2014/11/868482.php
2) (http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/1-23927-2006-09-30.html)