“Yolanda Mercedes de 60 años, muere al leer su recibo de sueldo en un cajero en Mar del Plata”. Esto no es solo un titular del diario, es la trágica muerte de una trabajadora, una auxiliar de escuela al leer que solo iba a cobrar menos de 100 pesos de su miserable salario a causa de los terribles descuentos que la gobernadora Vidal le propinó a ella y a decenas de miles de trabajadores de la educación de la provincia de Buenos Aires, junto con otros estatales, por hacer retención de tareas o parar. O simplemente por estar afiliados al gremio SOEME, aunque estuvieran con distintos tipos de licencias y no estuvieran adheridos a las medidas de fuerza.
Mientras tanto la propia gobernadora sin ningún pudor, retira más de 700.000 pesos para dar comodidad y seguridad a su propia casa del aeropuerto de Morón, según lo dice el propio Boletín Oficial.
Macri le prometió al Fondo Monetario un millón de despidos en el Estado, condición para pagar a los fondos buitre y aumentar las ganancias patronales y así lo cumple, y por eso, los trabajadores están luchando contra el 0 aumento a los docentes de Tierra del Fuego, por un 10% en Santa Cruz, nada en Santiago del Estero, y después de una lucha intensa en Mendoza se levantó el paro contra un aumento por presentismo llamado ítem aula. Por eso en el Ministerio de Trabajo y de Economía, los despedidos siguen yendo a trabajar y se resiste en el Hospital Posadas, así dispersos y en soledad en todo el país se dan luchas y conflictos por aumento de salario y despidos.
Unidad en los hospitales, escuelas y oficinas
El sindicato UPCN, que fue parte de la repartija de los miles de millones de pesos que van al bolsillo de los dirigentes con la excusa de las obras sociales apuró una firma paritaria a espaldas de ATE y SOEME, que como respuesta y desde las cúpulas largaron paros y planes de lucha separados, nunca juntos, El SUTEBA, diplomado en la carrera de “acuerdo de gobernabilidad”, echándole la culpa a los docentes por ser macristas, les regaló, junto con todos los demás gremios docentes, el inicio de clases en tiempo y forma que nunca le dieron a su amigo Scioli.
Los trabajadores tenemos la fuerza de estar juntos en nuestros lugares de trabajo, pero así como estamos juntos cumpliendo nuestra tarea, cada lugar de trabajo tiene delegados distintos de varios sindicatos, alguno llama a parar unos días como ATE, otro a hacer abandono de tareas, como SOEME, y otros a trabajar como UPCN.
Es hora de que empecemos a elegir delegados que sean los mejores compañeros, no el sindicato en el lugar de trabajo sino al revés, la voluntad de los trabajadores en los sindicatos, basta de quintas y negocios. Y que desde allí, se vote un plan de lucha para ganar que exija a todos que para que unifiquen las medidas y a los que llaman desvergonzadamente a la gobernabilidad que rompan con el Gobierno y se sumen a una lucha unificada.
En Bahía Blanca, en medio de una fuerte lucha de estatales que incluyó paros y toma del Consejo Escolar, la CTA y la CGT confluyeron en una importante acción común, hace pocos días, cuando Vidal visitó la ciudad. Esto muestra que la unidad esta planteada por la realidad. Para que las miles de Yolandas Mercedes, no esten solas y que sientan que somos parte de la clase trabajadora y allí está nuestro camino. Exijamos ya asambleas conjuntas en cada lugar de trabajo, que ATE y SOEME participen en un gran paro nacional de estatales el 19 de abril y de allí se haga un plan de lucha con junto por salario acorde a la canasta familiar, salud para todos y ningún despido más.