Acaba de cerrarse otro round ganado por los trabajadores de BedTime. Si bien los ánimos ya vienen caldeados porque la plata no alcanza para nada, es ante la negativa de la patronal de adelantar parte del sueldo previo al Día del Padre y el finde largo, lo que pone más caliente la situación. Con el Sindicato Plástico intentando aplacar la lucha (sin mucho éxito), comienza la pulseada: pliego de reivindicaciones votado en asamblea, reuniones, reclamos y otra negativa de la fábrica, que obliga a los trabajadores a tomar medidas más contundentes, como quites de colaboración por varios días y asambleas permanentes, con los trabajadores decididos a conseguir un viático para el conjunto (administrativos/as incluidos/as).
En respuesta, la patronal intenta desviar la lucha y dividir a los trabajadores, mandando cartas documento a la CI, para obligarlos a firmar un acuerdo en el que los delegados limiten su tiempo de trabajo sindical. El rechazo de la base a este intento disciplinador es contundente. Se mantuvieron firmes en la convicción de que solo las y los trabajadores deciden quiénes son, como actúan y para qué están sus delegados, y que nadie más debe interferir en esa conquista. Igualmente, es necesario seguir alertas, porque los ataques van a continuar.
Esta lucha se gana por la firmeza del conjunto. No hay grandes sumas que hoy salven a ningún laburante y su salario, el cual se ve atado a una inflación desbocada, y con un gobierno como el de Fernández, que se inclina ante el FMI y las multinacionales. Por más superministro que asuma, el plan sigue siendo el mismo: ajustar a las y los trabajadores. Por eso la pelea no termina acá. Lo ganado da fuerzas para continuar luchando.
Por la defensa de la unidad y la democracia obrera
Mientras que la asamblea brilla por su ausencia en muchos lugares dirigidos por la burocracia, en BedTime es la herramienta que se fortalece, así como la organización de los sectores y la fábrica de conjunto. El camino a seguir es no mover ni un dedo sin que la base dirija y sea parte con voz y voto (como menciona Fernando en la entrevista que hicimos a la Comisión Interna), incluso tomando tareas en la lucha cotidiana (como fue durante el conflicto y toma de fábrica de 2020). Defender la democracia obrera con uñas y dientes es una tarea fundamental. Las patronales tiemblan cuando los trabajadores se juntan y deciden usar su mayor herramienta, para unificar sus necesidades y decidir la forma de llevar adelante sus reclamos.
La incorporación de un sector de la administración a la CI es un cambio, que amplía la democracia de los trabajadores y la fortalece. Se necesita la incorporación de más compañeros y compañeras en las tareas de la CI para que nada quede entre 4 paredes, y que de verdad sea el conjunto quien tenga la última palabra en toda situación. Por eso, que se hayan empezado a elegir representantes por sectores es un nuevo e importante paso en el camino de garantizar la mayor unidad posible, y la división de tareas es cada vez más necesaria para sumar al conjunto.
Más coordinación por trabajo y aumento de salarios
Como dijo el compañero Héctor, es una tarea fundamental la coordinación con otros sectores, yendo en busca de otros compañeros del Plástico y de cualquier sector de trabajadores ocupados o desocupados que están peleándola, tales como el SUTNA, los mineros de Cerro Moro, los movimientos piqueteros y las mismas fábricas de la zona, para fortalecer la unidad y la pelea por un salario igual a la canasta familiar, y que nuestros salarios alcancen para vivir dignamente, tal como nos merecemos quienes trabajamos, y para que tengan trabajo quienes no lo tienen. Para eso, es necesario afrontar la creación y manejo de las bolsas de trabajo dirigidas por sus trabajadores y priorizando a las mujeres.
“El verdadero triunfo es demostrarle a la empresa que los trabajadores de BedTime estamos organizados”
Entrevista a la Comisión Interna (CI) de BedTime
AS: ¿Qué es esta CI y cuáles son sus objetivos?
Raúl: ¡Gracias por la entrevista! Nosotros venimos organizándonos desde 2008, nos fuimos renovando (yo soy el mas viejo). Nuestro objetivo siempre fue la estabilidad laboral, y también mejoras económicas y laborales. Esos fueron siempre nuestros pilares, y así empezamos a organizarnos con los compañeros con el método de la asamblea. Nos consideramos una CI clasista, porque defendemos a la clase trabajadora.
Por esta empresa pasaron muchas gerencias, y también mucha gente por la CI, pero siempre con este espíritu de tener los tres pilares en pie. Hoy tenemos nuevos compañeros, pero siempre con la misma base y solidez. Tuvimos que tomar la fabrica por 9 días en 2020, frenamos 50 despidos. La empresa no estaba pagando sueldos, toda una situación muy fea. Dimos esa lucha (donde ustedes y varias organizaciones estuvieron apoyando, y eso lo agradecemos mucho). Logramos el triunfo gracias a esa unidad que venimos construyendo hace mucho tiempo, y hoy tenemos la idea de mejorar lo económico, ya que con la inflación que hay día a día necesitábamos mejorar el sueldo.
A través de la asamblea, pedimos a la empresa varias cuestiones y logramos un viático, un reclamo muy sentido por los compañeros hace mucho tiempo. Se hizo más fuerte la cuestión cuando la empresa puso los chárter durante la pandemia debido a un decreto nacional, y luego de la misma manera lo eliminó. No pudimos retenerlo, pero quedó pendiente pelear por una ayuda al viático cuando llegara el momento, y ahora fue el momento. Logramos una suma muy superadora del viático real que tiene cada uno.
AS: Fernando, vos sos uno de los nuevos integrantes de la CI en este mandato, pero también uno de los trabajadores más antiguos de la fábrica, ¿por qué te sumaste?
Fer: Soy un nuevo integrante, aunque vengo participando por fuera desde 2008. Antes no pude sumarme por cuestiones particulares. Hoy llegó el momento de hacerlo, y el principal objetivo de sumarme es seguir defendiendo la organización y los derechos de mis compañeros y de sus familias, y de la mía también. Por eso me sumo, por necesidad. Lo que hay en esta fábrica no se da en muchos lugares y es algo valiosísimo, que es la organización de los trabajadores. No podemos mirar a otro lado y no defenderlo.
Siempre nos apoyamos en la herramienta de la asamblea de los trabajadores. La aprovechamos al máximo, y me sumo para seguir defendiendo ese método. Siempre tenemos que defender que los trabajadores tengan voz, libertad de expresión. Estamos a pocos días de haber resuelto una batalla salarial (lo del viático), pero los compañeros saben que el verdadero triunfo es demostrarle a la empresa que los trabajadores de BedTime estamos organizados, y que siempre vamos a defender nuestros derechos. En medio de esta última batalla, también la patronal atacó a los trabajadores a través de intentar regimentar a la CI, con cartas documentos y distintas artimañas… y no pudieron con nosotros. Mi mensaje es que los trabajadores de Argentina se levanten y peleen por sus derechos e intereses.
AS: ¿Cuál fue el rol del sindicato del Plástico en este tiempo en relación a las acciones y métodos que ustedes llevan adelante y que son diferentes a los del propio sindicato?
Raúl: La actuación del sindicato deja mucho que desear. No actúa con nuestros métodos. Gracias a la organización que logramos en la fábrica, nosotros actuamos y luego le consultamos o le avisamos lo que ya estamos haciendo. El sindicato participa de las reuniones porque no le queda otra, pero siempre debe respetar las decisiones de la asamblea. Logramos una fuerte organización que en otras plantas no existe, y tiene que respetarla. Nos extrañó y nos sigue extrañando que nunca nos hayan venido con desafueros. Suponíamos que con el gobierno anterior de Macri lo iban a hacer, pero no. Siempre nos manejamos en el camino de cubrirnos legalmente. Tampoco hacemos locuras, pero fundamentalmente tenemos a los compañeros apoyando detrás, para que el sindicato entienda que tiene que acatar lo que la base decida, venga quien venga. Porque siempre hay alguno que está destinado a asesorar cada fábrica, pero igual tienen que acatar lo que la base decida hacer.
AS: ¿Cuál es el rol actual de las mujeres en BedTime y lo que resta por hacer en ese sentido?
Héctor: Hoy es un tema apenas tocado la cuestión de la mujer en la fábrica. No tenemos compañeras en el área productiva. Sin embargo, la CI y los trabajadores siempre intentamos tener una política para acercar a las compañeras del área administrativa. Es una ardua tarea ya que las empresas discriminan a las mujeres al no tomarlas para la producción. En otros momentos hemos hecho reuniones, almuerzos para el día de la Mujer Trabajadora, intentando explicar cuál era el rol histórico de la mujer, y haciendo campañas frente a femicidios, tomamos el 3J del 2015 y lo que vino después. Pero necesitamos tener compañeras que cumplan un rol dentro de la CI junto con los compañeros, que lleven adelante las cuestiones propias en la fábrica, y por eso necesitamos tenerlas con nosotros en la producción.
AS: Sobre las perspectivas pos conflicto, ¿Cómo la ves tanto en la fábrica como en la zona?
Héctor: Reforzando lo que dijeron los compañeros, esto es una línea histórica de cómo manejarse en relación a las necesidades que tienen los trabajadores (al menos en esta fábrica), en relación al sindicato, a la patronal, etc., y en cómo se debe decidir todo. La asamblea es quien decide y quien lo lleva adelante. Lo que ganamos es mínimo en relación a las necesidades que tenemos, pero el triunfo nos envalentona y nos rearma frente a la situación económica del país, para salir a pelear y mejorar nuestro salario. Hoy la canasta básica está en más de 150 mil pesos, y tenemos compañeros acá que a pesar de todas las luchas que damos siguen teniendo sueldos de pobreza. Tenemos por delante muchas tareas, para cubrir las necesidades y llegar a sueldos que cubran la canasta familiar. Eso también nos plantea un trabajo a coordinar con otras CI de otras empresas y con los trabajadores, para tener más fuerza. La unidad que quiso romper la patronal en nuestro conflicto es lo que hizo posible las conquistas. Para con otras empresas lo mismo: a mayor unidad, mayores y más sólidas serán las conquista