¡Que no levanten ni firmen nada sin consulta previa en asambleas de fábrica!
¡Por salarios dignos y contra los despidos!
El CEO de Granja Tres Arroyos dijo sin vueltas que quiere bajar el salario promedio (en dólares) a menos de la mitad, dando como modelo ejemplar la reforma laboral brasileña.
Aunque de hecho la van aplicando en gremios y empresas, Macri vuelve a impulsar esta reforma acordada con el triunvirato de la CGT, que quedó empantanada luego de las jornadas de lucha del 14 y 18/12. Hay presos, procesados y persiguen a Sebastián Romero pues no perdonan esto.
Los dirigentes sindicales, en lugar de dar continuidad a estas batallas unificadas, las aíslan por gremios y empresas, o las distancian en el tiempo. Así contribuyen con las patronales a debilitar nuestra resistencia. Y así permiten la «gobernabilidad» de los ajustadores. Así no podemos seguir! Ni esperar hasta el 2019! El hambre y la miseria son ahora. Basta de Macri y el FMI!
El 21/2 pudo haber sido el preludio de un paro general y terminó enchalecado en un acto de bronca. Hubo masivas marchas el 8/3 y el 24/3… Ahora mismo peleamos por salarios, puestos de trabajo, condiciones laborales… en metalúrgicas como Electrofueguina (contra el hostigamiento de los jerárquicos para aumentar los ritmos), Audivic (contra despidos y atrasos salariales), etc. En empresas de otros gremios como Subtes, Expreso Lomas, Cargill, Arcor, TV Pública, CI5 del FC Sarmiento, YCRT, etc. Y bancarios, docentes, estatales… cada cual con «su» paritaria. Caló justifica esta política que divide al movimiento obrero, diciendo: “cada sector toma sus decisiones, y lo hace de acuerdo a sus salarios”.
Para nosotros urge unirnos en un reclamo común y con medidas de fuerza generales. Organizar la bronca e imponer a las centrales sindicales la huelga general para tirar abajo el techo salarial y los despidos, el tarifazo y las persecuciones antisindicales, la precarización y la reforma laboral, etc. Y para enfrentar la represión estatal, la otra cara del ajuste y del saqueo del país. Como los petroleros que solidariamente bajaron de las camionetas que los trasladaban, parando la represión policial a las estatales de Chubut.
En este marco, del Congreso Nacional de Delegados de UOM salió la convocatoria a paros de media hora por cada hora laboral y el paro nacional con movilización desde las fábricas a Plaza de Mayo, que no hay desde el 2009… Pese a que Caló insiste con que «no queremos poner palos en la rueda del gobierno», allí tronó el «hit» MMLPQTP…
Aunque el Secretariado que encabeza fue «facultado» a decidir sobre las negociaciones y estiró la fecha de la marcha al jueves 3/5, seguramente para arreglar antes o acordar con el ministerio de Trabajo la conciliación obligatoria, como otras veces, y seguir las audiencias otro mes moviendo sólo delegados. Caló reconoció que «queremos el mínimo (de $17.000) y después discutiremos los porcentajes». Si bien admitió que está en torno al 15% que quiere el gobierno, en dos o tres cuotas, incluyendo en la base de cálculo los $4.000 no remunerativos del año pasado. ¡Que el aumento salarial sea votado en las asambleas de base para que los Congresos de Delegados sean con mandatos!
Proponemos exigir que no achaten las escalas salariales: que ese mínimo sea en el básico del ingresante, no en el salario conformado; en una sola cuota; y que se aplique ese aumento proporcional en las demás categorías y ramas. Ajuste automático trimestral por inflación, no cláusula de revisión. ¡El convenio no se toca! ¡Que la rama 4 siderúrgica vuelva a unirse a las demás ramas por el aumento salarial! ¡No al congelamiento salarial hasta el 2020 en Tierra del Fuego! Por un plan económico al servicio de los trabajadores. Que, entre otras medidas, achique las importaciones a lo mínimo indispensable para desarrollar una industria pesada y semipesada; que estatice bajo control obrero las empresas que despidan y se nieguen a repartir las horas laborales entre todos sin achique salarial. Por los derechos de las trabajadoras, incluido el aborto legal, seguro y gratuito.
Sean estas u otras propuestas, organicémonos para que los directivos no levanten por TV el paro y la marcha. Definamos en asambleas cómo implementar el plan de lucha. Pero vayamos masivamente el 3/5 para darle un golpe a las patronales que nos impusieron una verdadera «guerra social» de la mano del gobierno hambreador encabezado por Macri, que las representa.
Vayamos masivamente también a exigir allí a Caló y compañía que nada firmen sin consultas previas en asambleas de fábrica. Para imponerles a Caló y los entregadores un verdadero plan de lucha por un aumento salarial considerable, superior al que están pactando. Para arrimarnos a la canasta familiar que ronda los $30.000.
Estamos por delegados democráticos y luchadores, como exigen -por ejemplo- los compañeros de Siam poder elegir libremente, contra la intervención de la seccional Avellaneda.
Hagamos como los colectiveros de la línea 620 que se autoconvocaron y, junto con otras líneas, le arrancaron a la UTA el paro regional en el Oeste bonaerense ante el asesinato de Leandro Alcaraz. O los empleados de Carrefour que se rebelan contra el acuerdo propatronal que los directivos de Comercio firmaron sin consultarles. Es el camino para contar con una dirección confiable.
Compañeros: no podemos seguir con estos dirigentes para defender lo nuestro. Coordinemos por abajo, unámonos desde las fábricas para luchar e impulsar la solidaridad con los que luchan. Para eso, intercambiemos contactos y vayamos construyendo una red de apoyo mutuo. Avanzada Metalúrgica y el PSTU estamos al servicio de esa tarea por nuevos dirigentes democráticos para pelear.