La cuenta regresiva para las elecciones se va acercando y todos los candidatos están en carrera. Si bien la gran mayoría no tendrá internas, esperan las PASO para “medirse” de cara a octubre. Todos los candidatos opositores se distancian del Gobierno para hacer su campaña, tratando de esconder que, en el Congreso, en la Justicia, o desde las organizaciones sindicales que dirigen han sostenido el plan del Gobierno. Todos ellos están al servicio de un mismo proyecto patronal: hipotecar el país a favor de los banqueros y buitres internacionales a costa de nuestros puestos de trabajo y nuestras condiciones laborales.
Por eso los socialistas del PSTU integramos el FIT, porque presenta una alternativa de los trabajadores a todas estas variantes empresariales.
Cambiemos: Los candidatos de Macri
Macri tiene sus candidatos, para seguir adelante con su plan de ajuste y que la crisis la paguemos los trabajadores.
Empleo y condiciones de trabajo: sólo en el 2016, el gobierno de Macri tuvo 250 mil despidos aproximadamente. En el último mes se habla de unos 4 mil puestos de trabajo menos en el sector privado, entre los que se cuentan Pepsico, Atucha y más. Si bien el macrismo utiliza cifras para decir que creció el empleo entre abril del año pasado y éste, lo poco que aumentó es el empleo precario.
En nombre de la modernización y las inversiones empezaron una campaña para modificar los convenios. Así lo han hecho con los petroleros de la Patagonia, secundados por los dirigentes sindicales traidores como Pereyra.
Quieren ir a fondo. Su plan es sancionar una reforma laboral como la que se aprobó en Brasil: jornada laboral de 12 horas, no pago de horas extras, vacaciones fragmentadas hasta en 3 veces, entre otras cosas, aunque por la campaña electoral y las luchas de los trabajadores, estarían pateándolo esto hasta después octubre.
Deuda externa: en el primer año de gobierno de Macri solamente, la deuda externa creció un 13,6% o sea, casi 35.000 millones de dólares. Todo esto mientras aumentó tarifas, intentó recortar subsidios y puso techo a los aumentos salariales.
Pero el Gobierno dio un salto tremendo en la entrega con el bono emitido a 100 años a un interés altísimo, hipotecando el país para beneficiar a los banqueros internacionales, los maestros de la estafa. Todo mientras el hambre sigue creciendo.
La “Unidad Ciudadana” de Cristina
La agrupación liderada por Cristina se presenta como la opción para frenar el ajuste del Gobierno. La ex presidente, rodeada de ex funcionarios de su gobierno, dejó de lado los símbolos peronistas y critica las principales medidas económicas de Macri. Sin embargo, olvida decir que mucho de los que profundizó el macrismo ya empezó con su gobierno.
Deuda: a pesar de sus discursos de “soberanía” los gobiernos kirchneristas fueron fieles pagadores de la deuda externa a los organismos internacionales. “Pagadores seriales como ufanó Cristina en el debate con los Fondos Buitres y el juez Griesa”. La deuda creció 150 mil millones dólares en 2003 a 250 mil millones en 2015.
Empleo: sin dudas en el gobierno de Macri los despidos dieron un salto brutal, sin embargo, tampoco debemos olvidar que gran parte de esto fue posibilitado por el gobierno anterior. El grado de precarización laboral que se extendió durante el kirchnerismo facilitó los despidos, ya que la primera variable de ajuste son los trabajadores en negro y contratados. Además, en 2008-2009 se da una primera caída masiva del empleo: 108.000 puestos de trabajo, que no se recuperaron.
Massa y el “progresismo”
El Frente Renovador de Massa se juntó con el GEN de Stolbizer. Ellos se presentan como la alternativa para aquellos que no quieren al Gobierno, pero tampoco confían en los kirchneristas. Pero Massa no resiste un archivo, porque, así como formó parte del gobierno kirchnerista, llegando a ser jefe de gabinete, fue el primero en salir a respaldar a Macri cuando asumió.
Empleo y condiciones de trabajo: atrás de discursos contra los despidos, se esconden las medidas concretas. Y cuando Massa era intendente de Tigre durante el 2009, estuvo a la cabeza de la represión a la lucha de Kraft (hoy Mondelez) contra 162 despidos. Pero eso no queda ahí.
Guillermo Nielsen, candidato a Jefe de Gobierno porteño en el 2015 por el espacio de Massa, se ha sumado a la campaña contra los juicios laborales, llegando a pronunciarse contra el fallo que ordena reincorporar a parte de los trabajadores de Pepsico. También es quién habla de reducir aún más el gasto público.
Deuda externa: Massa le dio su voto al acuerdo con los buitres en el Congreso el año pasado, así como apoyó varias otras leyes del oficialismo. Una vez más hablamos también de Guillemo Nielsen, que fue parte importante de la negociación para el pago al FMI durante el gobierno de los Kirchnner.
El PJ de Randazzo arrepentido
Randazzo, que en esta elección se presenta con el sello del PJ, se muestra como una tercera vía. Ahora dice que nunca fue kirchnerista y hace el listado de los errores del gobierno anterior, del cual era fiel funcionario, y también se diferencia del actual. Parece que recién recuperó la voz, ya que no se lo escuchó en todos estos meses de gobierno de Macri, Cuál es su programa de gobierno, realmente es difícil saberlo, ya que ni su pá- gina web tiene la plataforma. Promete cumplir con los sueños de todos los argentinos y demás generalidades que no dicen nada. Sin embargo, por los antecedentes y actuales acompañantes, es fácil suponer lo que en verdad pretende.
Respecto de la deuda, en el gobierno de Cristina fue un defensor de la política de pago y endeudamiento.
Respecto del empleo, durante su gestion dejó las manos libres a Cirigliano (el empresario responsable de la tragedia de Once) para cerrar la fábrica Emfer-Tatsa, productora de vagones y carroceria, para importar vagones chinos reciclados. Ademas, brilló por su ausencia cuando en estos últimos meses se destruyeron cientos de miles de puestos de trabajo.
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